Pero, enunciado esto, olvidemos este mal año 2009 y preparémosnos para recibir con ilusión el nuevo 2010. Un nuevo ejercicio que espero represente un cambio radical de estas negativas coyunturas.
Para que podamos conseguir este cambio radical, yo pondría en primer lugar a la casta política. No necesitamos ni politócratas ni políticos corruptos. Los ciudadanos necesitamos políticos que se olviden de intereses partidistas, que se olviden de los votos que puedan ganar o perder, y que empiecen a mirar hacia los intereses de los ciudadanos que los han votado. Se necesita de un pacto de Estado entre todos los partidos como el mejor instrumento para que España salga de la crisis.
A los Sindicatos les pediría que dejen de ser los paniaguados del gobierno de turno, y que de verdad empiecen a defender los intereses de los trabajadores que honestamente pagan sus cuotas a las organizaciones sindicales. Pediría en defitinitiva menos liberados y mas luchadores por los derechos del trabajador.
A los empresarios les pediría que se olviden de tanta globalización y que empiecen a orientarse hacia nuestro mercado local. Necesitamos menos multinacionales deslocalizables y mas empresas medianas y pequeñas que son las que verdaderamente generan puestos de trabajo y riqueza. A los banqueros les pediría que en vez de centrarse en apoyar a las grandes empresas, se centren mas en ayudar con su financiación a esas pequeñas y medianas empresas. Les pediría también que dejen de enriquecerse desmesuradamente a costa de las comisiones que cobran a los probos impositores.
Estoy convencido que este próximo año que empieza, aunque no todas, nos traerá algunas de estas cosas que pido.
FELIZ 2010