Conferencia política del PSOE sobre el programa electoral para Asturias. Hace ya tiempo que los programas de los partidos entraron en fase de devaluación y degradación, por la vía de evitar los asuntos candentes y refugiarse en generalidades. El asunto es captar votos y sacar escaños, a partir de ahí se toman las decisiones. Siempre hay algún aspecto concreto del programa que rompe con la tónica dominante de palabras huecas y ausencia de compromisos. En este caso, el PSOE avisa que va a acometer la rebaja del Impuesto de Sucesiones para las herencias pequeñas y medianas, dejando inamovible el gravamen sobre los grandes patrimonios recibidos. No contentos con su reforma, Javier Fernández llama hipócrita al PP por hablar de suprimir el Impuesto de Sucesiones pensando en la minoría de personas ricas con las que simpatiza. Ya saben el PSOE piensa en el bien general de la sociedad, es bueno y progresista, mientras que el PP piensa en los poderosos, es malo y reaccionario. Evitó el secretario general de la FSA explicarnos por qué al pasar un negocio del padre al hijo tiene que ir una parte para la Administración si el padre paga por ser titular del negocio y luego lo hace el hijo tras recibir la propiedad, qué razón hay para quitarles una parte.

En su intervención, Javier Fernández atacó a Podemos y al PP. Cuando un líder político critica a determinados rivales en temporada electoral es que los considera sus principales competidores en las urnas. Al PP lo asocia con una minoría social de privilegiados y a Podemos con la mentira. Dice que es falso el afán de cambio del partido de Pablo Iglesias, y que confunden opinar con mentir. También les acusa de actuar con premeditada indefinición para no granjearse la enemistad de parte del electorado. No creo que Podemos mienta más que el PSOE o que el PP. Me parece acertado subrayar la calculada indefinición de Podemos ante determinados asuntos, empezando por la negativa a declararse como partido de izquierdas, y siguiendo por rehuir cualquier manifestación sobre bajadas o subidas del IRPF, IVA o Impuestos Especiales. Ahora bien, los partidos tradicionales son maestros en discursear sin decir nada concreto, en proclamar buenos deseos sin asumir compromisos tangibles y mensurables. En marzo, Susana Díaz dio una lección sobre hablar mucho y no decir nada. Me temo que en Asturias ocurrirá lo mismo, viendo la escasa sustancia de la conferencia política del PSOE.