Cuando Constantino en el 303, decidió trasladar el Imperio a Constantinopla,antes Bizancio, una vez nombrada al catolicismo como religión del imperio, queda la duda si tenía información del peligro que significaban aquellos grupos humanos que empujaban detrás del Rhin , el Danubio y la Selva Negra buscando las riquezas de aquel Imperio Romano tan impresionante.

El caso es que en 406, el río Rhin se congela lo cual aprovechan todos aquellos grupos, centenares de miles llamados ” Bárbaros” (cuya palabra significa Berebere, los que no entendían), que cruzan a caballo , en carretas, a pie el mítico Río y que, aprovechando después el agotamiento del sistema, en 476, acaban con el Imperio Romano, y se quedan con sus riquezas y territorios

Histórico, por cuanto para los 600 aquellos pueblos, en su momento empujados por Atila hacia el occidente sobre los 400, terminaron convirtiéndose en la Europa Cristiana donde tanto valor tuvo el Papa Gregorio el Magnífico e Isidora de Sevilla.

Se recuerda aquella época, pero, a veces pensamos, que pasaría si se congelase el Mediterráneo o algo ocurriera en la frontera con los Estados Unidos. Los millones y millones en la miseria, donde están parte de los 3,600 millones que, según OXFAM,su riqueza es comparable a la de 8 hombres de Estados Unidos y Europa, que podríamos llamar “los Bárbaros del Sur” (a quienes tampoco entendemos ya sirios, ya africanos, ya salvadoreños), se lanzarían sobre Europa, Estados Unidos y Canadá en busca de la riqueza concentrada aquí.

Pero el Mediterraneo no se congelará, y la explosión estará latente.