Se cumplieron los pronósticos. Las encuestas no fallaron. Es más, casi se quedaron cortas. El componente racista no se impuso. La climatología no fue un obstáculo. Los indecisos no inclinaron la balanza del lado contrario, sino que se unieron al “movimiento de la esperanza”. Y el milagro republicano quedó en un sueño. O, más bien, […]