Qué pena. El cierre del Savoy II en abril es un mazazo, una putada en toda regla. No hay en Gijón otro discobar que tenga música en directo libre, gratuita y brillante tres días a la semana. Y todo ello, con buen rollo, con majo ambiente. Qué pena. Menos mal que nos queda el Savoy I, el clásico, aunque sea sin conciertos. Las cosas bien hechas siempre triunfan. Bien lo sabe Javi Savoy, todo un profesional de la música, de las copas y de la noche. Promete prolongar ese buen sabor y, sobre todo, esos directos en otro sitio “más idóneo”. Esperaremos por ti, Javi.
Entretanto, quedan en la recámara mental de todos cinco años brillantes. Queda también, a modo de despedida, un festival final, los días 7, 8 y 9 de abril, en el que actuarán todos los grupos rockeros astures que ya desfilaran por el Savoy II en este tiempo.
Cuando se está de alquiler nunca está garantizada la continuidad. Ahí está una lista de bajas en la que, personalmente, duelen demasiado el Cafetón, el Varsovia, el Caracol y el Escocia (aún no definitiva pero casi). Sugeriría una etiqueta para sitios como éstos, un distintivo municipal que los protegiera de coyunturas y facilitase una larga vida.
¡Viva el Savoy 3!