Con la suerte de cara, se vive mejor. Dos semanas consecutivas, al Sporting le ha sonreído y ahí estamos, un poco por encima de la línea de naufragio. Si estiramos un poco el pie, la tocamos. A tres puntos está. Era difícil ver un buen partido contra el Almería, pero lo importante, ya se sabe, era el zurrón. Y en él hemos metido tres puntos de oro. Vitales.
La satisfacción es mayor cuando hay semana de descanso. Soñaremos mejor trece días consecutivos. Y a la vuelta, el Madrid. Allí. Quién dijo miedo. Estarán de baja Xabi Alonso (él eligió la quinta) y Cristiano. Jugarán además con la mente puesta en el Tottenham, al que reciben tres días después: el martes. Esto supone un Madrid a medio gas. En casos precedentes en esta Liga nunca goleó (1-0 al Mallorca, 2-0 al Levante, 2-0 al Hércules…). O sea, que aunque la sorpresa sea realmente difícil, cabe. No concebiría regalar el partido con estos mimbres. Hay que salir a piñón. Y quién sabe…
Último apunte: tras ir a rastras durante varias jornadas allá por noviembre y diciembre, tras un experimento cada semana que casi nos lleva al abismo, Preciado ha dado con el equipo titular. Está bastante claro, con pequeñas variantes y un banquillo decentillo. Yo daría más mintuos a Sangoy; no puede ser que marcase golazos en verano y no sepa hacerlo en invierno.