PRIMER DÍA DE VACACIONES
Despertar natural a media mañana. Persiana subida. Aire fresco. Así arrancaron este sábado mis vacaciones. Con relax total, en vísperas de coger un avión a la costa gaditana. Pero había que espabilar un poco, hacer un par de recados. Así que agarré la moto y me planté en Paradiso para rematar el pack de libros para el viaje. Compré a Yann Martel y a Hamsun. Y puse rumbo al Mercadona a por unos plásticos (platos, tenedores, cuchillos y vasos) para aligerar el coñazo de fregar una comida de doce al aire libre. Allí me esperaba mi peor pesadilla en el lugar menos previsto; en la sección de droguería: ¡Goñi! ¡Fernando Goñi en versión estoy de fin de semana, sin su traje de enterrador, con vaquerucu y náuticos! Buagggggggg. El señor presidente de la Junta General del Principado por obra y gracia del hermanamiento entre populares y socialistas in person. Junto a mí. Yo, mareado, aturdido por la visión, hube de pedir auxilio a una curranta del Mercadona. ‘Por favor, ¿dónde están los cubiertos de plástico?’. Al otro lado del pasillo, justo detrás. Justo de donde venía huyendo de Goñi, que explicaba con su cavernosa voz popular a un conocido las excelencias y dificultades de su nueva etapa política, su Phaeton y sus ‘tareas’. Me acerco a ambos e intento llegar con la mano hasta los cubiertos, pero el carro de Goñi me lo impide. ¡Me está haciendo la pinza! Es un experto en pinzas este Goñi; pinzas PP-PSOE, pinzas Mercadona… Dudo si denunciarlo ante el encargado, que además tiene cara de muy malas pulgas, pero me corto. Seguro que dan la razón al señor presidente de la Junta General. Así que hago un escorzo, me alargo como un espagueti, tomo mi mercancía y me voy como alma que lleva el diablo. Espero que la pinza no me persiga.
Tras una jornada plácida en el prau, recuperándome de la visión de Goñi y de su voz caversona, vamos una doble pareja a ver ‘Mamma Mia’. El musical me lava el cerebro y lo pone a airear. Hoy ‘Mamma Mia’ y mañana Cádiz, pienso satisfecho. Pero la imagen de Goñi me persigue. Temo que irrumpa en cualquier momento en el escenario, entre las chicas y los tres potenciales padres de la hija de la protagonista, presidiendo, no ya la Junta General, sino el clásico baile coral con pantalones de lentejuelas y el pecho peludo al descubierto. La pinza se puede producir en cualquier momento. Y yo, asturiano orgulloso de mi tierra, habría de arrojarme al vacío ante tal desmán. Pero no. Goñi no sale a bailar. Como dice Norman Mailer, los tipos duros no bailan. Y a este impopular popular no le veo en ese rol. A lo sumo, a lo Travolta, con tupé junto a un coche. Pero esa peli no la dan esta semana. Ahora estamos digiriendo algo así como ‘Coge el dinero y corre’ o ‘El padrino’ 0 ‘Fiebre del sábado noche’, protagonizada por PP y PSOE. Disfruto del musical, me doy a la bebida y me acuesto. Mañana por la mañana saldré volando de Asturias (Espero que Goñi no se agarre in extremis a las ruedas del avión con su traje de lentejuelas). Cuando regrese estaremos en julio. Y me temo lo peor…