Autor: Guillermo Fernández Buergo
Se llevan consumidos dos meses desde el inicio de la temporada cinegética en la comarca y es una buena ocasión para poner sobre la mesa los primeros datos. Hasta el momento se llevan abatidas 922 piezas, de las que 790 son jabalíes, 55 corzos, 50 venados, 20 gamos y siete rebecos. El cerdo salvaje es el principal reclamo para los cazadores de la zona y del total de verracos capturados, el 55% doblaron la rodilla en los concejos de Llanes, Piloña, Parres y Cangas de Onís. En las primera jornadas, la mayoría de los suidos abatidos eran de escaso trapío, entre 40 y 50 kilos, pero en las últimas fechas ya se van haciendo visibles los grandes acorazados, macarenos con pesos superiores a los cien kilos.
Un año más, los números que presenta el coto de Llanes, con 185 suidos apiolados, resultan espectaculares. En el territorio operan once cuadrillas que acuden a ocho lotes de caza. El cupo de capturas es de cuatro jabalíes por montería, excepto en el cuartel de La Mar donde se pueden abatir seis verracos y en el Río de Nueva donde sólo se autoriza a cobrar tres. El sexteto de navajeros que se permite tumbar en La Mar responde a los más de 70 accidentes de tráfico provocados en esa zona, desde la playa de Buelna hasta el arenal de San Antolín de Bedón, por la presencia de jabalíes en la calzada.
Los datos de La Parraguesa (espacio que engloba las tierras de los concejos de Parres y Cangas de Onís) y Piloña, con 139 y 109 macarenos tumbados en sus respectivos territorios, son interesantes al tratarse de dos cotos que ofrecen sus mejores resultados en el tramo final de la campaña. Eso sí, Piloña aparece ligeramente descolgado al tomar en consideración las mismas fechas en temporadas anteriores.
En Cabrales, donde se prendieron hasta la fecha 78 jabalíes, todo lo que pase de cien ejemplares por campaña se considera aceptable. El concejo lleva varios años encabezando la lista de capturas en pequeños municipios y desde hace un lustro resulta habitual superar esa mítica cifra del centenar.
Las dos Peñamelleras unidas sumarían hoy 70 gorrinos abatidos pero como les gusta ir por separado en la contabilidad, se hace necesario señalar que en la Baja se prendieron 39 suidos y en la Alta, 31. Y Colunga mantiene el tipo con una cifra interesante: 54 chones pasaportados desde septiembre.