La innovación, el cambio climático, las consecuencias de la pandemia en la construcción y un negocio que bate récords históricos de rentabilidad forman parte de la coctelera agitada por la multinacional francesa Saint-Gobain, que el próximo día 1 de julio inicia una nueva etapa de transformación con un cambio en su dirección general y en la cúpula directiva. Asia y América son los objetivos preferentes. La planta de Avilés puede ver despejado su futuro ante la constatación de que el negocio de la construcción y el profundo cambio del sector del automóvil puede conllevar beneficios en todos los órdenes a nivel global.
Benoit Bazin (Boulogne-Billancourt, Francia, 1968) será el nuevo director general de la compañía, sustituyendo al histórico Pierre-André de Chalendar. En la reunión de la asamblea general celebrada en París el pasado día 2 se anunciaron las claves del nuevo plan estratégico que deberá presentarse en 2025, en sustitución del actual ‘Transform & Grow’, y que se centrará en la expansión internacional en América y Asia y en continuar revisando las actividades.
Tras la asamblea general, fue Javier Gimeno, el único español en el nuevo organigrama de la dirección, el que desveló una serie de datos relevantes sobre Asia, y más en concreto sobre China, que se presentan como claves para entender lo que está sucediendo en el mundo y de qué forma afecta al negocio de Saint-Gobain, tanto en vidrio para construcción y acristalamiento como en el sector del automóvil. En unas declaraciones recogidas por el diario Les Echos, Javier Gimeno, hasta ahora director general del área Asia-Pacífico y a partir del 1 de julio de la de Latinoamérica, apuntaba una serie de datos que no dejan indiferente a nadie.
Asia representa casi la mitad de la construcción mundial y el 60% de los coches producidos y vendidos. Sin duda, un bocado apetecible para una multinacional como Saint-Gobain, que de momento solo alcanza en los catorce países asiáticos en los que está presente el 10% de su facturación.
Los aproximadamente 15 millones de personas que cada año abandonan el campo en China y se van a vivir a las zonas urbanas provocan una explosión en la construcción de vivienda y en la adquisición de automóviles. Se estima que China, según los datos manejados por Javier Gimeno, todavía tiene 189 vehículos por cada mil habitantes, una tasa muy baja si se compara con los 837 de Estados Unidos y los 569 de Europa. Eso significa 400 millones de coches adicionales en China.
La nueva clase media
Respecto a la construcción, Saint-Gobain abrió en mayo una nueva planta para satisfacer mejor un mercado en crecimiento gracias a las aspiraciones de la nueva clase media de viviendas modernas. La intención ahora es abrir una nueva fábrica cada seis meses, en vista de un crecimiento interanual del PIB de un 18%, lo que da una idea del potencial de crecimiento en todos los órdenes.
Además, en vista de estos parámetros, China ha dejado de ser para Saint-Gobain una plataforma de producción de bajo costo desde la que exportar. El negocio será ahora en Asia y para Asia, con una fase de expansión para sumar a sus 12.000 empleados y 15 fábricas actuales, apuntalando países como Birmania y Vietnam, sin olvidar otros como Tailandia, Malasia, Japón o Corea. Y, además, tratando de fortalecerse en actividades tecnológicas o de bajo capital intensivo que generen efectivo como soluciones de impermeabilización, química de construcción o incluso placas de yeso, con vistas a las exigencias de la neutralidad en carbono marcada por China para 2060.
Son apuntes breves sobre una multinacional que mantiene en Avilés una planta sobresaliente en España, que está a la espera de que esta explosión del mercado traiga también, en breve, buenas noticias para Asturias.
J. M. U.
No hay día sin escándalo en el intrincado mundo de la ciberseguridad. Rusia estuvo en el centro de las acusaciones en los últimos meses/años, pero ahora le toca el turno a los «buenos». Los cables submarinos que alojan la fibra óptica y que permiten las comunicaciones intercontinentales a través de miles de kilómetros alojados en el fondo de los océanos han sido utilizados por la agencia de inteligencia estadounidense (NSA) para, a través de sistemas de vigilancia danesa, espiar las comunicaciones de altos funcionarios y políticos de Alemania, Suecia, Noruega y Francia. Entre los afectados, la mismísima Merkel. La ‘vigilancia’ se utilizó para acceder a sus SMS, llamadas telefónicas y servicios de mensajería. Y no lo olvidemos: por el fondo del mar pasan nuestros datos personales alojados en Facebook y en todos los GAFA. Nuevo aviso.
J. M. U.
El tiempo vuela y en este caso nunca mejor dicho: en 20242025 podrían entrar en servicio los primeros taxis voladores en las ciudades europeas, es decir, ‘mañana’. Así lo ha asegurado Patrick Ky, director ejecutivo de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), que, según los datos que maneja, estaríamos ante un mercado de 4.200 millones de euros para 2030 que creará 90.000 puestos de trabajo. EASA ya ha comenzado el proceso de certificación de algunos de los diseños. Y como suele ser habitual, la startup alemana Volocopter y Aéroports de Paris esperan poder demostrar esta tecnología en los Juegos Olímpicos de París en 2024. El comercio y su reparto y las emergencias sanitarias se presentan como los grandes mercados de estos taxis.
Mientras alguno piensa todavía en la ficción de ‘Blade Runner’, otros ya se han metido en materia, por ejemplo, en Jaén.
Vivimos tiempos de transformación hacia una nueva era digital que impacta en todos los aspectos de nuestras vidas, en nuestras relaciones personales, con las administraciones públicas, en nuestros modelos educativos y sanitarios, todo a nuestro alrededor evoluciona y, muy especialmente, el modo como las empresas gestionan todos sus procesos y sus relaciones con clientes y proveedores. No es una simple modernización, es una transformación que implica innovaciones radicales, culturales.
Esta nueva era está creando nuevas profesiones y forzando la desaparición o reconversión de otras. Los profesionales del ámbito de la informática son claramente los grandes beneficiados, demandados a nivel global y captados por empresas ubicadas en los lugares en los que se concentran las grandes tecnológicas.
En Asturias, el sector TIC es el que menor porcentaje de paro tiene, según la última encuesta de población activa. En la programación y la consultoría informática, el crecimiento del empleo fue del 4,4% el pasado año, cifras que se vienen sosteniendo en la última década. Las administraciones públicas también ofrecen buenas oportunidades, como demuestra la reciente bolsa de empleo para titulados superiores y medios TIC que acaba de publicar el Principado para un proyecto tan atractivo como es el construir la plataforma regional de servicios públicos digitales.
La digitalización acelerada por la pandemia de todos los sectores de actividad económica asturiana, especialmente el industrial, está creando oportunidades laborales muy atractivas para estos profesionales TIC en proyectos desafiantes y de alto impacto; si a ello sumamos la calidad de vida de la que podemos disfrutar en Asturias y lo multiplicamos por el efecto del teletrabajo, que puede permitir a un profesional trabajar de forma deslocalizada, se crea el caldo de cultivo perfecto para el retorno del talento que habíamos exportado.
Publicado en las páginas de AsturiasInnova+ en El Comercio-La Voz de Avilés el 13 de junio de 2021