Por el bien de Asturias y de Avilés, el Principado debe reconducir una oscura polémica inexistente
El Principado, la Consejería de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo, a través del flamante viceconsejero de Ciencia, Investigación y Transformación Digital, Iván Aitor Lucas del Amo –ascendido por la baja temporal por enfermedad del titular Borja Sánchez– viene manteniendo y alimentando desde hace un par de semanas aproximadamente una polémica sobre Idonial y su futuro basada en hechos que no son ciertos. En la sección de Economía de este periódico encontrará hoy el lector un amplio informe de Noelia Erausquin sobre la situación de Idonial, que amenaza el futuro del centro tecnológico más importante del Principado de Asturias, con una extraordinaria relevancia para Avilés como centro neurálgico de toda la I+D+i ligada al sector industrial y en donde operan buena parte de las compañías integradas en su patronato.
Solo la prudencia, en aras a esperar a que en los próximos días se pueda reconducir el actual estado de cosas para que Idonial no solo siga siendo el referente tecnológico industrial de Asturias, sino que se convierta definitivamente en el gran centro tecnológico de futuro, invita a no entrar en todos los detalles. Del actual viceconsejero depende reconducir una situación que sólo él con sus intervenciones ha provocado.
De todas formas conviene recordar algún detalle por situar el actual estado de cosas. El Principado viene de cosechar un sonoro fracaso en su intento de crear un gran centro tecnológico en base a la fusión de los centros tecnológicos existentes en Asturias. Un mal planteamiento hecho por una consultora vasca, a la que se han pagado 208.000 euros, presentando una guía en la que se echaban en falta los detalles clave de esa fusión o integración, hizo que CTIC (Centro Tecnológico de la Información y Comunicación), ASINCAR (Asociación de Investigación Industrial de la Carne del Principado de Asturias) y CETEMAS (Fundación Centro Tecnológico y Forestal de la Madera) se fueran descolgando del proyecto «al no verse cumplidas las expectativas de rigurosidad y profesionalidad del mismo».
Al final se quedaba solo Idonial como el gran centro tecnológico ligado a la industria, que nace en 2019 tras la fusión del ITMA (28 años de antigüedad) y Prodintec (14 años). El único centro por lo tanto que sabe lo que es una fusión. El Principado anuncia entonces un ambicioso proyecto –contrato programa– sobre Idonial dotado con nueve millones de euros en tres anualidades, lo que sin duda constituye un espaldarazo definitivo para que Idonial siga avanzando en su carrera de éxito continuado. Le avala su trayectoria y su historial.
Es entonces cuando tiene lugar la reunión del patronato, compuesto mayoritariamente por las empresas –lideradas por ArcelorMittal– como corresponde a una entidad privada sin ánimo de lucro. En esa reunión se habló de todo, incluso de la posibilidad de que las empresas empezaran a pagar anualmente una cantidad fija. Pero se hizo ver que el estudio de la consultora vasca no profundizaba en aspectos claves como el de nuevas líneas de investigación por poner solo un ejemplo, y se instó a que se presentara un nuevo documento que recogiera todos los detalles para llevarlos a una nueva reunión. Ni sí ni no. Más datos, más concreción y disposición a seguir adelante.
No hubo más. Pero el Principado, su viceconsejero –como consta en las hemerotecas– transmite a la opinión pública que el patronato vota en contra del contrato-programa, seguido de un «allá ellos» con su decisión, que «ese dinero servirá para crear otro centro tecnológico en Asturias», y de paso se lanza al comité de empresa de Idonial, liderado por CC OO, que «compra» el discurso, monta unos días de huelga y termina sus lemas con que «el cese de la dirección es irrenunciable», aprovechando que se está negociando el convenio que es el que debe resolver cuestiones como el de los emolumentos de los trabajadores e investigadores, o el problema que se viene arrastrando desde el momento de la fusión de mantener dos tipos de convenio en la plantilla. Ya era lo que nos quedaba por ver: un sindicato interviniendo en una empresa-entidad privada y pidiendo el cese de la dirección ¡Qué antecedente! ¡Y que pase el siguiente a partir de ahora!
Todo eso hasta que, por fin, el patronato –los privados, mayoritarios– decide intervenir y dejar las cosas claras. Tarde, como casi siempre, porque han dejado que se vaya imponiendo ante la opinión pública un discurso que parte de una premisa falsa. Dice esa mayoría que en ningún momento se ha opuesto al contrato-programa, simplemente señala que hay que presentar un plan concreto, creíble y de futuro. Y a partir de ahí, adelante, dispuesta a todo.
Las consecuencias de la interpretación del Principado «suenan» mal. Sirva este otro dato. El Principado concede anualmente una subvención nominativa a cada centro tecnológico. En el caso de los tres que renunciaron al contrato-programa no ha habido cambios respecto a la subvención de 2024-2025. Idéntica cantidad a la de ejercicios anteriores: CTIC, 100.000 euros; ASINCAR, 100.000; CETEMAS, 330.000 euros. Pero, ¡oh sorpresa! Idonial pasa de 400.000 euros anuales a 100.000. ¿Asfixia económica? ¿Represalia?
Avilés necesita a Idonial como el gran centro tecnológico actual y futuro de Asturias por ser clave en el entramado de I+D+i ligado a la industria, partícipe de la Manzana del Acero con ArcelorMittal, eje de todos los centros de I+D+i que se han creado en Avilés, regido por un patronato en el que figuran las empresas industriales más importantes de esta región, puesto de ejemplo por la propia consejería, un referente dentro y fuera de nuestro país. Avilés, la ciudad entera, deberá estar vigilante a partir de este momento ante una operación ‘extraña’. (Continuará).
Publicado en La Voz de Avilés-El Comercio el 19 de enero de 2025