Se acaba de reeditar ‘El valle negro’, de Alfonso Camín. Un paso más en lo que será un larguísimo camino de recuperación, conocimiento y reconocimiento de un literato en estado puro, de un escritor prolífico, de un testigo privilegiado de la Asturias de su tiempo, de un poeta de raza, autor de poemas memorables.

Alfonso Camín, poeta de Asturias. Alfonso Camín, la galerna que pasó a galope por aquel siglo XX tan convulso en Asturias, en España y en Cuba. Alfonso Camín, poemas de una bravura memorable, clamores que provocan estremecimiento. Alfonso Camín, cuya vida no es menos literaria que su obra. Alfonso Camín, cuya obra necesita una antología obligada para un público lector que se pierde entre los libros agotados y entre la interminable lista de títulos. Alfonso Camín, que falleció un 12 de diciembre de 1982, en unas condiciones de vida lamentables, sin ayuda alguna de la Asturias oficial de entonces.

Desde el 82 a esta parte, a pesar de los incontables, abrumadores y tremendos despilfarros que sufrimos, no hubo dinero de parte de la Asturias oficial para dedicarlo a esa antología necesaria habilitando ayudas a los estudiosos que pudieran llevarla a cabo.

Es mucho lo que representa este poeta de raza. No sólo estamos hablando del creador de la llamada poesía afroantillana. No sólo estamos hablando del Blasco Ibáñez asturiano en sus libros de memorias sobre sus recuerdos de esta tierra. No sólo estamos hablando de un poeta que pasó por distintas etapas, también la modernista. No sólo estamos hablando de un poeta que se hizo eco de la Asturias que fue vanguardia en el movimiento obrero, especialmente en la minería. No sólo estamos hablando de un indiano de la literatura que lo sitúa también en la poesía del siglo XX en aquellas latitudes. Un indiano de la literatura que relató vivencias que compartieron tantos asturianos de su tiempo, vivencias que empiezan por las duras condiciones de un largo viaje cuya meta más deseada era dejar atrás la miseria. Meta que, a decir verdad, pocos consiguieron.

Desde hace muchos años, Albino Suárez viene luchando por el reconocimiento de la obra de Camín. El cantautor Rafa Lorenzo lleva tiempo poniendo música a poemas del vate astur. También otras personas se sumaron a este empeño a todas luces necesario. Pero seguimos sin contar con esa antología necesaria. Pero seguimos sin contar con una biografía imprescindible, tan llena de avatares, tan siglo XX, tan literaria, incluso puede que más literaria aún que su propia obra.

¿Cómo es posible explicarse, desde la Asturias oficial, que alguien que tiene el merecidísimo título de ‘poeta de Asturias’ no haya contado con el apoyo institucional para que su obra sea accesible y conocida para el público lector? No estamos hablando de Rubén Darío, pero sí de un poeta imprescindible para un mejor conocimiento de la Asturias de su tiempo.

¿Y qué decir del Camín periodista? ¿Cómo es posible que esta faceta suya esté tan abandonada institucionalmente?

Hablemos de Alfonso Camín, y hagámoslo, nunca mejor dicho, por justicia poética.