Recién salidos de las elecciones municipales y autonómicas, donde muchos ciudadanos mayores sufrieron y padecieron muchos problemas para ejercitar su derecho al voto por correo, ahora nos encontramos con el anunciado adelanto de las elecciones generales, que han sido convocadas para el próximo 23 de Julio, en las que muchas personas mayores estarán en sus residencias de vacaciones al cuidado de nietos.
Conforme a los datos que he visto del Instituto Nacional de Estadística, el 24% del censo electoral está formado por personas de mas de 70 años y se da la circunstancia, además, de que son muy fieles a las urnas. Confirma esto también lo que han dicho las oficinas de Correos, respeto a que los mayores son uno de los grupos mas previsor a la hora de solicitar el voto por correo.
Por lo que se ha visto en las anteriores elecciones municipales y autonómicas, el voto por correo ha sido muy complicado para esas personas de edad avanzada, tanto por la dificultad de desplazarse a la oficina de correos más cercana a su domicilio, como por la dificultad añadida que les genera la cumplimentación del formulario para solicitar el voto, por su configuración con letra pequeña, que genera problemas para rellenarlo escribiendo con un bolígrafo, que generalmente les presta la propia oficina de correos. Lo habitual es que, una vez dentro de la oficina, se solicite número para ser atendido en una de las ventanillas, una vez identificado se les de la solicitud para su cumplimentación, algo que tienen que hacer en mesas habilitadas fuera de la ventanilla. Una vez hecho esto, se vuelve a pedir número y nuevamente a esperar para ser atendido… Entre una cosa y otra, el trámite puede durar mas de una hora.
En vez de ir a la oficina de correos, para agilizar el trámite, otra opción podría ser la de utilizar el procedimiento de solicitar el voto telemático. Pero, aquí las dificultades derivadas de la brecha digital, aun son mayores, ya que muchos de ellos, ni tan siquiera tienen internet, pero si lo tuvieren, no van a tener un DNI electrónico o un certificado digital como el que expide la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre y tampoco tendrían un lector del DNIe para conectarlo a un pc o a una tableta, para realizar la identificación.
Pero, aun cuando, superadas todas las dificultades, hubieren podido hacer la solicitud electrónicamente, días después, por correo certificado, recibirían la documentación para realizar correctamente el voto por correo y si se diere la circunstancia de que no estuvieren en casa al personarse el cartero en el domicilio, este les dejaría un aviso, al objeto de que se acercaran a la oficina de correos para recoger la carta certificada que contiene la documentación. Y una vez allí, recogida toda la documentación, tendrían que extraer del sobre la papeleta de voto que les interesara, extraer también el certificado facilitado por la oficina del Censo Electoral, meterlo en el sobre de votación y volver a pedir número para ir a la ventanilla, una vez llamado, para depositar el sobre que contiene la papeleta de voto.
La conclusión es muy clara, si la experiencia anterior fue muy mala para ejercitar el voto por correo, se imagina amigo lector, los grandes problemas que ahora van a tener en las próximas elecciones ya anunciadas, en la que muchos abuelos, entre los que me encuentro, estaremos al cuidado de nietos en zonas de veraneo y que nos obligaría a regresar a nuestro domicilio para ejercitar el derecho al voto.
Estoy convencido qué en esta nueva votación a realizar en una fecha tan inadecuada, los problemas de todo tipo van a ser mucho mayores ya que seguramente habrá oficinas de correos colapsadas e incluso con riesgos de huelga, lo que impedirá el voto de muchas personas mayores.