Cuando a nivel de calle se habla de nuestra radio televisión autonómica, RTPA, solemos encontrarnos con comentarios tales como que su programación es muy discutible, o que la Tele Tini es poco independiente, o que tiene muy baja calidad, o que apenas tiene audiencia. Evidentemente nos movemos en el terreno de la subjetividad y por tanto los comentarios y opiniones suelen ser para todos los gustos. Pero, cuando hablamos de sus costes, la unanimidad es total, ya que los datos económicos que arroja nuestra radio televisión autonómica, son demoledores.
Pese a las fuertes pérdidas que registra, como esto lo pagamos todos, vi que este año los gastos se incrementaron en más de 200.000€ a causa básicamente, de la contratación de tres nuevos directores para las áreas de informativos, antena y medios digitales, además de dos secretarias de dirección. Indignado y abochornado al conocer esta información, entré en el portal de transparencia de su página Web y pude comprobar que en el año 2014, el resultado neto negativo había sido de 19,7 millones de euros, que en 2015, fue de 19,5 millones y que la previsión para 2016 puede llegar a los 20 millones, debido básicamente al incremento de la masa salarial que pasa a ser de 5,5 mio en 2014 a 6,5 en 2016 (en tres años los sueldos se han incrementado en un millón de euros). Resulta igualmente sorprendente que pese al incremento de la masa salarial y de las plantillas, la TPA encarga trabajos a otras empresas por un importe de 9.224€, ya que excepto los informativos y el magazine vespertino que se refrescan y actualizan todos los días, el resto de programas y contenidos se dan a empresas externas.
En resumen que, para mantener esta inútil TV autonómica, que ni tan siquiera llega al 5% de audiencia, el Principado tiene que dar una subvención de 19.608 millones, subvención que evidentemente pagamos todos los asturianos.
Me resulta sorprendente e incluso indignante que, la Ley General de Comunicación Audiovisual publicada en el pasado año 2012 y tramitada por el procedimiento de urgencia, pretendía reducir la deuda de las Comunidades Autónomas a través del control del gasto de las TV regionales. Esta nueva Ley permite a los gobiernos autonómicos valorar lo que ha de hacer con tus televisiones, manteniendo o no el servicio en función a sus beneficios o pérdidas y dejando muy claro que estos entes no pueden tener déficit, al no permitirse desequilibrios en los presupuestos. Caso de que existan desequilibrios, el camino que marca la Ley es el de encargar la gestión a empresas privadas. Muchas Comunidades y entre ellas Madrid, están valorando esta posibilidad y algunos Presidentes ya empiezan a hablar de privatización porque esas enormes pérdidas no se pueden sostener.
Pero, amigo lector, en este estado de cosas y con ese agujero de pérdidas tan monumental, en nuestra televisión, no sólo no se habla de equilibrar presupuestos o privatizar, sino que, muy al contrario, como si fuéremos ricos, incrementamos la plantilla y los sueldos en medio millón de euros. Bochornoso e indignante. Creo que la RTPA y nuestros políticos, se están riendo de los asturianos.