La encuesta muestra la valoración de once políticos, seis del PP y cinco del PSOE. El grupo está formado por los dos principales líderes nacionales, destacados dirigentes regionales y los alcaldes de Gijón, Oviedo y Avilés. En el quinteto socialista sólo Zapatero obtiene una nota inferior al 4,2, mientras que en el sexteto del PP hay cuatro dirigentes que no llegan a esa calificación. De las once personalidades, la nota más alta es para Álvarez-Cascos (5,04) que gana por tres centésimas a Paz Fernández Felgueroso, y la calificación más baja para Ovidio Sánchez, con un 3. Javier Fernández obtiene una nota ligeramente más alta que la del presidente Areces y queda a menos de ocho décimas de Álvarez-Cascos.
La alta valoración del ex ministro de Fomento está en sintonía con el papel decisivo que tendría su participación en la candidatura asturiana del PP, tal como se revela en la encuesta. La excelente nota de Fernández Felgueroso tiene que ver con la imagen que ha proyectado durante once años desde la Alcaldía de Gijón, sabiendo combinar un alto sentido institucional con la cercanía a los ciudadanos. Particularmente reseñable la buena valoración que ha obtenido siempre Paz Fernández Felgueroso entre la población femenina, que ha sido más crítica con otras mujeres con cargos institucionales. El farolillo rojo para Ovidio Sánchez tiene que ver con la forma indolente de hacer política, tanto al frente del partido, como del grupo parlamentario.
En la encuesta aparecen las opiniones sobre lo que harían votantes de una candidatura liderada por Álvarez-Cascos en caso de que no fuese el ex ministro el cabeza de lista del PP. El desencanto de ese grupo de electores se convierte en un amplio abanico de comportamientos electorales. La mayoría se mueven entre el abstencionismo, el voto en blanco y el desconcierto del “no sabe”, aunque el resto de siglas se vería beneficiada, en especial, UPyD y el PSOE.
Cobremos perspectiva. La encuesta está realizada en septiembre, un periodo en el que Gabino de Lorenzo, con la complicidad de Ovidio Sánchez y algunos dirigentes municipales del PP, cometió la doble cacicada de dar a conocer una terna de candidatos, para elegir, posteriormente, por su cuenta, a Pérez-Espinosa. Ni el mayor enemigo del PP sería capaz de planear una estrategia tan deletérea para el electorado de derechas.