Desde Madrid, donde acudió a la reunión de la Junta Directiva Nacional del PP, Gabino de Lorenzo insistió en la oferta de pacto global (Principado y ayuntamientos) que hace su partido a Foro Asturias, de modo que gobierne en las instituciones la lista más votada de ambos partidos. Esta propuesta ya fue expuesta por Pérez-Espinosa a Álvarez-Cascos, cuando se reunieron en la Junta General del Principado para hablar de gobernabilidad.

PSOE e IU tienen una alianza municipal que se rige por la misma pauta que propone De Lorenzo para Foro Asturias y PP. El precedente de la izquierda, desarrollado en varios mandatos, hace que parezca natural y lógica la propuesta del alcalde de Oviedo. En principio, es preciso recordar que el acuerdo de apoyar ciegamente la lista más votada presenta problemas en todas las legislaturas en algunos ayuntamientos, pese a que IU sólo gobierna en media docena de consistorios. Hacer alcalde a un candidato de otro partido sin discutir sobre el programa de gobierno es una decisión que sólo pueden tomar los concejales de ese consistorio. Fijar desde las direcciones de dos partidos quién debe ser el alcalde de un ayuntamiento concreto no deja de ser una invasión de la autonomía municipal, que provoca frecuentes conflictos que acaban en expedientes disciplinarios. Ahora bien, lo que ya supone un salto cualitativo es atar en un mismo acuerdo la gobernación del Principado y los ayuntamientos. ¿Los acuerdos nacionales alcanzados en el Congreso de los Diputados condicionan la estrategia de los partidos en las Cámaras autonómicas? ¿Por qué los pactos municipales se pueden trasladar mecánicamente a la Junta General del Principado, y viceversa?

La propuesta de De Lorenzo es un mero reparto de poder hecho desde la cúspide de los partidos, marginando a los representantes elegidos por los ciudadanos. Aún con todo, puede servir como pauta de orientación, pero no se puede convertir en un mandato taxativo para todas las instituciones, de modo que convierta en herejes a los grupos municipales que no lo secunden. De Lorenzo tiene asegurada la reelección con la abstención del PSOE, pero está muy interesado en el acuerdo global, porque busca con la excusa del pacto hacer a Foro Asturias cómplice de su gobierno (desgobierno). El pacto global implica asumir el trueque de Villa Magdalena.