Dolores de Cospedal ha afirmado que el PP no va a expedientar a los concejales que votaron a candidatos de Foro Asturias para hacerlos alcaldes. El argumento dado por la secretaria general del partido es que “el PP busca lo mejor para sus votantes”. El mismo razonamiento que pronunció Fernández Pardo en la tarde del pasado sábado para justificar el apoyo dado a Carmen Moriyón para convertirla en alcaldesa de Gijón. Es un argumento de peso, porque el electorado de centro-derecha nunca habría perdonado al PP la investidura de alcaldes de izquierda pudiendo otorgar con su voto las alcaldías a Foro Asturias. Ahora bien, no deja de ser una insuperable ironía del destino que De Cospedal diga que el PP busca lo mejor para sus votantes, cuando hace seis meses la dirección nacional del partido tuvo en sus manos convertir a Álvarez-Cascos en candidato ganador del PP y optaron por una concejala de Gabino de Lorenzo que condujo al catastrófico resultado de todos conocido.
La declaración de la secretaria general del PP deja a los dirigentes regionales a los pies de los caballos. El equipo de Ovidio Sánchez había hablado de expedientar a los cargos públicos del partido que respaldaran a concejales de Foro Asturias, y llega la mano derecha de Rajoy para desautorizarlos al decir que los concejales díscolos del PP actuaron bien. La cúpula nacional del partido rechaza la posibilidad de tomar medidas contra los que contravinieron las directrices de la dirección regional y, previamente, los concejales del PP hicieron oídos sordos de las órdenes del equipo de Ovidio Sánchez. No les hacen caso ni los de arriba ni los de abajo. Un buen motivo para que Ovidio Sánchez, Pérez-Espinosa, Caunedo, Goñi, Aréstegui y compañía, dimitan, cosa que no va a ocurrir porque ni siquiera barajaron esa posibilidad la noche en que el PP perdió más de la mitad de sus votos.
De Cospedal dice que PP y Foro Asturias dialogan sobre un pacto regional. ¿Y quién negocia por el PP? Los mismos que presionaron en vano a los concejales de su partido y son desautorizados por la dirección nacional. Desde el día de las elecciones autonómicas la imagen dada por la dirección regional del PP es penosa. Desconozco lo que pensará Rajoy, pero con estos mimbres es muy difícil afrontar las elecciones generales en Asturias con una mínima garantía de éxito. Hay que pensar en renovar.