Los portavoces de PSOE y PP le piden a Álvarez-Cascos que solucione los problemas internos y se ponga a gobernar. Por problemas internos entienden la renuncia de Miguel Ángel Forascepi a desempeñar el cargo de viceconsejero de Educación, un asunto que el interesado ha querido justificar con una referencia genérica: motivos de salud. No es agradable tener que comunicar el fallido nombramiento de un alto cargo de la Administración cuando ya se había dado a conocer su nombre y la tarea que iba a desempeñar, pero con todos los respetos para el señor Forascepi no creo que deje un hueco imposible de cubrir. Debe haber varias decenas de potenciales candidatos con parecida capacidad para hacerse cargo de la Educación asturiana. ¡Que todos los llamados “problemas internos” tengan que ver con la espantada de un funcionario en víspera de asumir responsabilidades políticas!

La idea de “ponerse a gobernar” es sugerente. ¿Cuándo un presidente gobierna y cuándo pierde el tiempo? Desde el día de la toma de posesión del cargo, Cascos ha presidido el Consejo de Gobierno, ha nombrado viceconsejeros, asistió al Pleno de la Junta General del Principado, así como a otras actividades de menor rango institucional. Cualquier inicio de mandato sigue esos pasos. A la oposición le parece poco y quiere que se “ponga a gobernar”, sin aclarar lo que entiende por ello.

En las últimas semanas, los partidos de la oposición han concentrado sus energías en un asunto de gran trascendencia para resolver los problemas de Asturias: el cambio, por vía de urgencia, de la normativa para publicar los bienes patrimoniales de los diputados. Como dice Joaquín Aréstegui, el presidente y su esposa ya pueden cumplir ese trámite de forma voluntaria. A eso se llama, “hacer oposición”. Las urgencias de los partidos de la oposición tienen que ver con la declaración de bienes de los cargos públicos, que ya se hicieron un destacado protagonismo en el debate de investidura. Mientras nadie defina lo que se entiende por gobernar, para aproximarnos al concepto nos permitimos relacionar el desempleo (el principal problema de los asturianos) con la actividad del presidente, que hoy se reúne con los comités de empresa de Alas Aluminium y Venturo XXI, así como con los sindicatos CCOO y CSI de Naval Gijón. Grupos de trabajadores que no están entre las urgencias del Parlamento.