Rajoy ha sido investido presidente con los votos de su grupo y los diputados de Foro y UPN. Pese al trato deferente prodigado por Rajoy, CiU votó en contra. Se abstuvieron los nacionalistas vascos. El PNV lo hizo para evitar el rechazo al nuevo presidente, porque aunque Rajoy goza de mayoría absoluta los dirigentes vascos no renuncian a sacar leche de las ubres del Estado. El caso de Amaiur es distinto. El grupo radical se abstuvo para no implicarse en la elección de un presidente español. Hace 33 años, cuando se celebró el referéndum de la Constitución, el PNV llenó las calles del País Vasco con carteles que decían: “¿Votaste la Constitución de EE.UU? Ésta tampoco”. Una consigna ácrata, que demuestra la pulsión antisistema de los grupos nacionalistas.

Conclusiones del debate. Rajoy no enseñó las cartas para evitar un choque frontal con la oposición y prolongar su luna de miel con la opinión pública. La izquierda y los nacionalistas estuvieron muy moderados, porque no les interesaba confrontar con un presidente que goza de mayoría absoluta y tiene intacto su capital electoral. Tiempo habrá para la crítica acerada.

Desde la perspectiva de los intereses asturianos, este debate de investidura fue distinto a todos los anteriores. Es la primera vez que en una sesión de investidura se habló de Asturias. A Álvarez Sostres le cupo el honor de poner a nuestra región en pie de igualdad con otras comunidades (Aragón, Cataluña, Galicia, Canarias, Valenciana, País Vasco). Los parlamentarios se enteraron de que no crecimos en población en los últimos 10 años, mientras el resto de España aumentaba en ocho millones. Los diputados supieron que Asturias es la región con una tasa de actividad (personas entre los 16 y 65 años que desean trabajar) más baja, y que en aumento de PIB somos los penúltimos. También habló Sostres de la variante de Pajares, de los costes eléctricos del corazón industrial asturiano (ArcelorMittal, Alcoa, Asturiana de Zinc), de los problemas de la ganadería y de la escasa financiación que llega del Estado para las prestaciones de la Dependencia. Y Rajoy tuvo que referirse a los problemas de nuestra región, prometiendo solucionarlos. En el intercambio dialéctivo, Rajoy llegó a decir que “no voy a entrar en los líos del PP de Asturias”. Tendrá que entrar en ellos si quiere resolver los problemas de la región.