Ante el Comité Federal del PSOE Rubalcaba dio por finalizada la etapa de las ofertas de pacto al Gobierno y pasará a realizar una oposición nítida. El líder de los socialistas señaló que nada será como hasta ahora. El máximo órgano de dirección de los socialistas está dispuesto a levantar un muro para frenar las políticas del Gobierno.
Rajoy no aceptó entrar por la vía del diálogo y la negociación con el principal partido de la oposición. En ocho meses de mandato, el Gobierno tomó decisiones importantes de forma unilateral. Aunque las negociaciones y los consensos están muy bien valorados por políticos y ciudadanos, me parece que cuando un gobierno tiene una mayoría absoluta tan amplia como la del Ejecutivo de Rajoy procede tomar decisiones por su cuenta sin perder el tiempo en discutir y regatear con los grupos de la oposición. Esta norma tiene una excepción: cuando se piden sacrificios extraordinarios a toda la población, la unanimidad parlamentaria tiene un valor añadido. Subir el IRPF, el IVA o los Impuestos Especiales (tabaco, hidrocarburos, alcohol) es una decisión ordinaria de cualquier gobierno que se encuentre respaldado por una mayoría suficiente. Si lo que estuviera en juego fuera un plan de austeridad con renuncia de todos los asalariados a un porcentaje significativo de su sueldo, creo que el Gobierno debería presentarlo como fruto de un amplio consenso parlamentario. Este último supuesto jamás estuvo sobre la mesa, ni con el Ejecutivo de Zapatero ni con el de Rajoy. El PSOE dice que levantará un gran muro contra los planes de ajuste. Es probable que lo intente, pero cuenta sólo con 110 diputados, la cuota parlamentaria más baja que tuvo en treinta y cinco años de democracia. Un muro que se salta con facilidad.
El cambio de estrategia de los socialistas no se puede disociar de los malos resultados que cosechan en todas las encuestas. A escala nacional el PSOE no despega, porque la gente tiene muy reciente el recuerdo de Zapatero. Dentro de ese panorama general, el triunfo de Javier Fernández en la pasada primavera fue la única noticia buena tras el triple batacazo sufrido en el año 2011: derrota en las municipales, autonómicas y generales. Todo indica que en el próximo mes de octubre Patxi López sufrirá una severa derrota y Rubalcaba se quedará sin heredero oficial. El PSOE asturiano aparece como única referencia.