Termina el plazo para presentar los presupuestos si se quiere aprobarlos antes de que finalice el año. El calendario se agota, pero no se respira dramatismo. El Gobierno regional ya ha hecho el trabajo principal, negociando con IU el incremento de partidas sociales (se suaviza en 86 millones el recorte en sanidad) e incluyendo la introducción de tributos que pedía la coalición. En este último punto se produjo un cambio durante la negociación al renunciar IU a incrementar los tipos impositivos sobre Sucesiones y Donaciones, Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, para dar paso al establecimiento de un tributo sobre la banca. La última palabra sobre el particular no la han dicho ni IU ni el PSOE, sino Rajoy, fijando un tributo sobre la banca con tipo impositivo cero. A IU le quitaron el juguete de las manos, pero no renuncia a introducirlo en el presupuesto; en su objetivo encontrará el apoyo del Gobierno socialista que quiere llevar al Tribunal Constitucional la medida de Rajoy. El Principado tiene toda la solidaridad de la dirección federal del PSOE, que ha incorporado el impuesto a la banca en el programa del partido.
Armado un bloque de 22 diputados (17 PSOE, 5 IU), el Gobierno regional negocia con UPyD el alineamiento de la mayoría absoluta de la Junta General del Principado a favor de los presupuestos. Les falta el escaño sobre el que está sentado Ignacio Prendes. El diputado de UPyD pone como condición para aprobar los presupuestos la reducción de gasto superfluo “en viajes, conferencias, reuniones y organismos”. A su vez, desea incrementar los recursos destinados a vivienda de alquiler, a planes concertados con los ayuntamientos, a inversión en nuevas tecnologías y a las entidades independientes que se dedican a trabajar en la calle con los más desfavorecidos. No puedo por menos que felicitar a Ignacio Prendes por esta última propuesta, ya que es la primera vez que un diputado pone sobre la mesa de la negociación regional la elevación de las ayudas a Cáritas, Cocina Económica, Proyecto Hombre, etcétera, que son las organizaciones que más combaten los efectos de la crisis.
Con un mero recorte cosmético del gasto corriente no hay margen para financiar tantas iniciativas como propone Prendes. Es imposible tener un gran protagonismo en el presupuesto, cuando PSOE e IU ya cocinaron el acuerdo.