El viaje oficial del Principado a tres países americanos es el primero que se realiza después del accidentado periplo del Gobierno de Areces, acompañado de empresarios y sindicalistas, a varios países del mismo continente. La mecha de la controversia de aquel viaje fue la escala en Cuba. Enseguida saltaron voces discrepantes, diciendo que en Cuba no había nada que vender, a lo que se sumaron otros contando que la visita a la isla tenía carácter turístico. El PP monopolizaba la oposición, y atacó con dureza la escala cubana, haciendo alusiones a la dimensión lúdica de la visita. Del caso particular, el PP pasó a la generalización: el coste de los viajes oficiales es muy superior al beneficio, pidiendo explicaciones sobre las ventajas concretas obtenidas de las giras al extranjero.
Un amplio abanico de políticos asturianos en ejercicio hizo viajes oficiales a Cuba, empezando por el actual delegado del Gobierno que en su época de alcalde de Oviedo se puso al frente de una nutrida expedición, que rubricó con gran éxito, acompañado de su familia, entrevistándose con Fidel Castro, en un encuentro que empezó a las once de la noche y se prolongó hasta las ocho de la mañana. De Lorenzo estaba en su segunda legislatura, gozaba de la mayoría municipal más amplia de su biografía política (63% de votos, 18 concejales) y el periódico oficial del régimen cubano lo inmortalizó en la foto de portada tapando la alopecia con una peluca comunista, dando a entender que los encuentros del Comandante con políticos calvos suponían un desdoro para el máximo líder de la revolución.
Excepto en las dictaduras (donde salir del país es peligroso, porque se puede perder el sillón), todos los gobiernos hacen viajes al extranjero. Una parte fundamental del trabajo de los políticos es vender las potencialidades del territorio, haciéndose acompañar por empresarios que producen los bienes y servicios que se ofertan. El objetivo último es la firma de contratos, pero no se puede pedir que en unos días se concreten las operaciones comerciales, siendo suficiente con que se hagan los contactos previos. No es lo mismo que un empresario vaya de país en país, que viajar encuadrado en una expedición oficial. En la actualidad, con el consumo por los suelos debido al ajuste fiscal, todos citan como salida nacional la exportación. Razón de más para viajar.