El Centro Superior de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha dado a conocer los resultados del barómetro correspondiente al mes de abril. Partidos y líderes políticos alcanzan las valoraciones más bajas de la etapa democrática. Especialmente los dos partidos mayoritarios y sus jefes de fila. Baste decir que Rajoy recibe una calificación semejante al portavoz de Amaiur, o que Rubalcaba y Rajoy inspiran “poca o ninguna confianza” a casi el 90% de los encuestados. El trabajo de campo se realizó en la primera semana de abril.
Simultáneamente, el CIS ha dado a conocer el barómetro de las comunidades autónomas, en los que se indaga sobre cuestiones similares al sondeo nacional. No obstante, no se pueden comparar ambos trabajos, porque en el barómetro sobre Asturias, con 400 personas encuestadas, las entrevistas se llevaron a cabo en los meses de septiembre y octubre del pasado año. ¿Qué fiabilidad pueden tener los datos de una encuesta cuyo trabajo de campo corresponde a hace seis meses? La publicación de los resultados, bajo la apariencia de estar presentando “pescado fresco”, es completamente engañosa. En una situación de crisis profunda, como la actual, en un semestre se produce un cambio en las valoraciones de la ciudadanía similar al que ocurre en dos o tres años en una sociedad sin graves problemas económicos y sociales. En definitiva, lo más relevante del barómetro autonómico es el desfase temporal. El CIS interpreta una foto del pasado.
Los más beneficiados por el desfase temporal que contiene la encuesta son los gobiernos autonómicos, ya que la crisis económica, con la galopante subida del desempleo de los últimos seis meses, erosiona a los partidos en el poder. Este factor cobra una singular importancia en Asturias, donde el nuevo Gobierno de Javier Fernández tomó posesión en el mes de junio de 2012, y acababa de concluir el periodo de gracia de los primeros cien días de gobierno cuando se realizaron las entrevistas. Es muy probable que el sondeo arrojase unos resultados sensiblemente distintos de haber efectuado el trabajo de campo el pasado mes de abril, con 122.700 parados en la región. En el barómetro, la gestión de Javier Fernández recibe el respaldo del 21,3% de los encuestados, 37,5% cree que es “regular”, mientras que hay un 17,6% que la considera “mala” o “muy mala”. Necesitamos datos de hoy.