Tras investigar la evolución de patrimonios y rentas de José Ángel Fernández Villa, la Unidad Central Operativa (UCO) concluye que utilizó la marca sindical, SOMA-UGT, para ingresar 541.057 euros procedentes de Hunosa. Entre 1989 y 2001 recibió cheques por valor de 243.462 euros, y entre 2001 y 2012, transferencias a las cuentas del SOMA-UGT. Los cheques se libraban en concepto de pago de dietas a los sindicalistas del Sindicato Minero que acudían a las reuniones del comité intercentros. El dinero era retirado por colaboradoras directas de Villa y el dinero contante y sonante llegaba finalmente al líder sindical. El exsecretario general del SOMA también recibía 800 euros mensuales, con los que financió dos vehículos de marca japonesa. Según José Antonio Postigo, amigo y lugarteniente de Villa, algunos de los anteriores ingresos fueron hechos para compensar el deterioro económico sufrido por el amado líder tras perder su escaño en la Junta General del Principado. Y, finalmente, estaban las tarjetas de crédito del sindicato, con las que se aprovisionó de bienes de primera necesidad, como una caja de puros Cohiba, de más de 1.500 euros, dos relojes suizos de 1.500 y 3.000 euros, así como un tercer “peluco”, a un precio francamente interesante (472 euros). A todo ello hay que añadir los diversos aprovisionamientos realizados en unos grandes almacenes, conocidos por todos, donde compró libros, cintas, colonia selecta, etcétera, que ascendieron a miles de euros.
A la hora de hablar del sistema de bienestar de Villa, hay que añadir que en todos esos años, como en parte de los anteriores y en los posteriores, no trabajó ningún día en Hunosa, porque estaba liberado. Minero de nombre, ocioso de profesión y rico de cartera. Los cheques cobrados por Villa, las transferencias a la cuenta del sindicato, y los bienes adquiridos con las tarjetas, seguro que escandalizan a muchos asturianos, que viven o malviven de su trabajo o la subvención del desempleo. Un sentimiento sincero. Lo que me llama la atención no es el sentimiento de la mayoría, sino la hipocresía de esa minoría del SOMA y del PSOE, que trabajó estrechamente con Villa durante muchos años, y ahora se rasga las vestiduras como si nunca se hubiera enterado de nada. ¿Ignoraban todo los directivos de Hunosa? ¿Y los mandamases del sindicato? ¿Y los dirigentes del partido? Sospecho que los agentes de la UCO todavía no acabaron su trabajo.