>

Blogs

Juan Neira

LARGO DE CAFE

GRIETAS EN EL INDEPENDENTISMO

La simple contestación al requerimiento de Mariano Rajoy abre grietas entre el independentismo. La mayor parte de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) y la CUP quieren que Carlos Puigdemont diga la verdad, orgulloso de haber protagonizado el acto de proclamación de la república, mientras que los dirigentes del Partido Demócrata Europeo de Cataluña (PDeCAT) apuestan por una contestación sibilina que evite la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Unos quieren rotundidad y los otros ofrecen ambigüedad. Ambas respuestas responden a dos estrategias distintas.

Puigdemont puso en marcha la alambicada ceremonia de la proclamación con un doble objetivo: impedir una fuerte respuesta del Estado y lograr mantener unidos a los tres partidos que hacen viable la acción del Govern en el Parlamento. La primera meta es evidente que la alcanzó y la segunda, también, con la excepción del enfado de la CUP, algo muy difícil de evitar. La idea de dejar la república suspendida fue de Artur Mas para negociar con el Estado en posición de fuerza: el as de la república en la bocamanga. Toda negociación necesita tiempo y por eso había que huir de proclamaciones explícitas. A día de hoy no han cambiado de guion y quieren responder a Rajoy con diplomacia para ganar días, quizás semanas.

Un agente del independentismo tan influyente como la Asamblea Nacional Catalana (ANC) ha cambiado de postura y exige que Puigdemont ponga las cartas boca arriba a Rajoy. Que prescinda de disfraces y le responda como presidente de la república catalana. Aseguran que mejor hacerlo así porque Rajoy ya puso a rodar el procedimiento del artículo 155. La cúpula de ERC piensa algo parecido. Bajo las apariencias se esconde la realidad: los dirigentes de ANC y ERC desconfían de las influencias de Mas sobre Puigdemont, y temen que el ‘president’ abra una vía posibilista de entente con Madrid. Con otras palabras: que les engañe. Tratan de impedir que se negocie un apaño y por eso desean mostrar orgullo republicano.

En ANC hablan ya de organizar paros masivos para impedir la aplicación del 155. ERC y ANC compran con retraso la política de la CUP. En resumen, los independentistas se debaten entre la estrategia de Artur Mas y el belicismo de la CUP. No es preciso que haya enfado entre gente del mismo bando porque sus demandas republicanas, aplazadas o anticipadas, impedirán cualquier compromiso con el Estado. Les tocará recoger los vidrios rotos después de los paros.

Temas

por JUAN NEIRA

Sobre el autor


octubre 2017
MTWTFSS
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031