Pedro Sánchez escogió armas para batirse con las elecciones generales por delante, y las autonómicas y municipales a modo de segunda vuelta para venganza de líderes y votantes arrepentidos. Políticos y observadores se preguntan si mereció la pena formar gobierno para disolver las Cámaras antes de los nueve meses. Desde la perspectiva de los intereses […]