La cosa va de misivas. Carmen Moriyón contestó a Álvarez-Cascos con una larga carta en la que pone al fundador de Foro frente a su responsabilidad. Es la primera vez que en el partido de Cascos alguien le canta las cuarenta a Cascos. Los grupos políticos marcados por el hiperliderazgo de sus creadores tienen siempre un acusado déficit de democracia interna. Ciudadanos o Podemos son buenos ejemplos. No obstante, con el transcurso del tiempo, hasta en esos grupos aflora el pluralismo. El enfrentamiento del sector crítico (Roldán, Nart, Garicano) con Rivera fue noticia de primera página en todos los periódicos, en cuanto a Podemos, basta con mirar hacia su ex número dos, Íñigo Errejón, para constatarlo. En Foro nunca nadie había dicho nada. Pasó de estar en el gobierno a luchar por tener representación parlamentaria sin que se ensayara ninguna explicación. La carta de Carmen Moriyón supone un punto de inflexión. Le recuerda a Cascos que fue él quien decidió el eslogan de la campaña, el cartel, el programa, las notas informativas. Todo. Por eso resulta asombroso que pida responsabilidades por el mal resultado. En el texto, la actual presidenta repasa las dos decisiones del fundador de Foro que hundieron al partido. La primera, la disolución de la Cámara a los seis meses de mandato, algo que no había ocurrido nunca en una comunidad autónoma. Ahí se acabó la sintonía del partido con la opinión pública. El segundo fue borrarse del cartel electoral tres meses antes de celebrarse las elecciones autonómicas de 2015, cuando era el líder indiscutible, dejando boquiabiertos a propios y extraños. En ese envite, la representación parlamentaria quedó reducida a la cuarta parte, al pasar de doce a tres diputados. Ambos hechos (volver a convocar elecciones a los seis meses y renunciar a encabezar la candidatura) y sus consecuencias nunca fueron acompañados de la más leve crítica.
En la carta, Carmen Moriyón dice que Cascos estuvo ausente los meses de verano, pero «cuando Foro logró la constitución del grupo parlamentario, con la consecuente aportación económica al partido que ello conlleva, decidió regresar para intentar retomar el control del partido». Este asunto no puede quedar en veladas alusiones. ¿Hubo en alguna época un manejo inadecuado del dinero recibido por razón de la representación institucional? ¿Todos los gastos o entregas de dinero realizadas por Foro estaban debidamente justificados? Luz y taquígrafos.