Las consecuencias de la inflación han tenido un notable protagonismo en la Junta General del Principado. La consejera de Hacienda ve un futuro negro para los concursos convocados por el Principado, ya que el alza de los precios conllevará que queden desiertos o que se retrase su ejecución. Habrá concursos desiertos porque las condiciones iniciales han quedado desfasadas y ya no resultan rentables para las empresas. Todo ello redundará en nuevos contratos, con lo que el retraso de los proyectos está asegurado.
La consejera lamenta que el gasto corriente del Principado se vea afectado por el crecimiento persistente de precios en suministros, material de oficina, material sanitario, etcétera. Valora el incremento del gasto corriente «en varios millones de euros». ¿Cuántos? ¿Cinco, cincuenta, quinientos? No se sabe. La misma reflexión que Ana Cárcaba se la hacen todos los días las amas de casa con el gasto familiar. El Principado no prevé un aumento de los ingresos este año. Lo argumentó diciendo que las «entregas a cuenta (del Estado) para este ejercicio son las que son» y no se ajustarán hasta 2024. Volvemos a la indefinición. ¿Qué quiere decir con que las «entregas son las que son»? Las valoraciones en Hacienda hay que acompañarlas con números.
La parte más arriesgada de la intervención parlamentaria llegó cuando la consejera afirmó que el crecimiento de los precios en los próximos ejercicios no repercutirá en la Hacienda del Principado. Se refirió a los dos principales impuestos, IRPF e IVA. Sobre el Impuesto de la Renta señaló que «no hay una relación directa entre precios y recaudación». No entiendo la afirmación, sin embargo, seguro que la consejera entiende si le decimos que la subida de precios conlleva crecimiento de salarios y una mayor cantidad a pagar por IRPF. ¿A qué es muy fácil de comprender? ¿Recuerda Ana Cárcaba aquello que le contaron sobre la inflación de costes, la espiral precios-salarios, en su época de estudiante? En cuanto al IVA dice «que los ingresos se verán mermados por la caída de consumo». No es muy realista decir que se va a recaudar menos por consumo cuando la subida de precios roza el 10% a estas alturas del año. Es una aseveración que va en contra de la lógica. A mediados de marzo, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) aseguró que el aumento de los precios supondrá un ingreso extra de 3.500 millones por IVA y de 4.100 millones por IRPF. No hay ninguna razón para pensar que Asturias sea una excepción.