Carmen Chacón intervino en un mitin, en Oviedo, al que asistieron más de 1.000 personas. La ministra de Defensa vino a colaborar en la campaña de los socialistas asturianos, al igual que también lo hará Rubalcaba. Ambos ministros aprovechan la campaña electoral para visitar las distintas comunidades autónomas y tantear los apoyos que tienen para presentarse a las elecciones primarias. Aunque parezca paradójico, vistos los resultados de las encuestas, el que pierda esas elecciones primarias tendrá más futuro político que el que las gane.

La ministra de Defensa dijo que a los asturianos nos había tocado lo peor con la vuelta de Álvarez-Cascos a la política regional. Carmen Chacón aseguró que el político gijonés había formado parte del comando central del ‘caso Gürtel’, que venía investido del papel de salvador y que había que tener memoria sobre cuál había sido su actuación cuando estaba en el Gobierno. Por último, la ministra aseguró que Cascos había estado suplicando a Rajoy para que lo nombrara candidato, y que al no ser atendido formó un partido y por eso en las elecciones hay dos derechas.

En una visita relámpago, Carmen Chacón se sumó al nuevo deporte regional que consiste en atacar a Cascos y a Foro Asturias. Es lógico que lo haga el PP, porque tiene en Foro Asturias a un inesperado competidor. Lo que ya no encaja tanto es que lo hagan los dirigentes de izquierda asturianos, porque para toda la izquierda española, desde Zapatero hasta Felipe González, el principal rival electoral es el PP. Pero que Chacón o Blanco dirijan sus principales dardos contra Cascos es sorprendente. El PSOE y el PP juegan una liga particular, y en el balance de la noche electoral se resaltará cuántas comunidades autónomas quedaron en manos de cada uno de los dos partidos. Un gran resultado para Cascos llevaría aparejado un pésimo resultado para el PP en Asturias, algo que no debería entristecer a la ministra de Defensa. Por las intervenciones de Chacón y Blanco, tal parece que los socialistas tienen en Foro Asturias a su principal rival. Chacón es la embajadora de un partido, él de los socialistas catalanes, que impulsó las políticas más inquietantes para la solidaridad que predica la izquierda asturiana. En pleno siglo XXI, sustituyó el socialismo de la igualdad por el socialismo de la diferencia. Y pretende mandar en España.