Aunque el Gobierno de Javier Fernández lleva sólo tres meses al frente de los destinos de Asturias, los grupos de oposición piden que se celebre ya el debate sobre el estado de la región. Se trata de un pleno parlamentario que se suele celebrar a finales de septiembre o principios de octubre, de modo que sirve de apertura del curso político, dada la escasa o nula actividad parlamentaria que hay tradicionalmente en esas fechas. La importancia de esta sesión en la Junta General Principado reside en el chequeo que se hace de los problemas asturianos, teniendo menos relevancia las resoluciones concretas que se aprueban.
A finales del pasado mes de mayo tuvo lugar el pleno de investidura de Javier Fernández, en el que el actual presidente presentó su programa de gobierno y discutió con los portavoces de los partidos de oposición sobre los más variados temas que preocupan a los ciudadanos. Convocar una sesión plenaria de la Junta, ahora, para discutir sobre los mismos asuntos es innecesario, cuando no contraproducente, por el hastío que causa a la población. Se entiende que IU y UPyD quieran celebrar el debate, porque la experiencia indica que los grupos abiertamente minoritarios se suman a todo tipo de iniciativas parlamentarias para ganar protagonismo. Si fuera por ellos, continuamente se estarían negociando pactos, abriendo comisiones parlamentarias y realizando comparecencias. Mucho más extraña es la postura de Foro, ya que el pasado año estaba Álvarez-Cascos en las mismas circunstancias que se encuentra ahora Javier Fernández, y el entonces partido del Gobierno defendió que no hubiera debate sobre el estado de la región. Y no lo hubo. Queda por posicionarse el PP, que defendió esta primavera que no hubiera debate sobre el estado de la nación, y ahora puede caer en la contradicción de exigir en Asturias a Javier Fernández lo que rechazó en Madrid para Mariano Rajoy.
¿Qué pasó en Asturias en los últimos tres meses, desde la investidura de Javier Fernández? El Principado negocia un crédito de 423 millones con los bancos para echar a andar el presupuesto ajustado, tras consensuarlo con el Ministerio de Economía. Fuera del ámbito institucional, la huelga de dos meses de los mineros se estrelló contra el inmovilismo del ministro de Industria. Y muy poco más. ¿Merece la pena repetir un debate general sobre Asturias?