El Tribunal Constitucional (TC) ha dado la razón a un recurso presentado por Foro contra la elección de Luis Fernández Garay como alcalde de Cudillero, afirmando que la renuncia hecha en su día por todos los concejales socialistas al puesto de alcalde es firme e irrevocable para todo el mandato. Ningún edil del PSOE puede acceder a la Alcaldía, así que el municipio se enfrenta a una crisis política de difícil solución, porque el partido mayoritario no va a permitir que el centro-derecha se haga con el Ayuntamiento. Si los mayoritarios (PSOE) están incapacitados para hacerse con el gobierno del municipio y los minoritarios (Foro y PP) cuentan con más votos en contra que a favor, el Ayuntamiento se encamina hacia la formación de una gestora o al adelanto electoral.

Todo lo que sucede en el Ayuntamiento de Cudillero es de exclusiva responsabilidad socialista después de cinco mandatos de mayoría absoluta. Tras veinte años en el poder, Francisco González dejó el consistorio a los nueve meses de iniciado su sexto mandato para incorporarse a la lista socialista de los comicios autonómicos del 25 de marzo de 2012. No es muy usual que un alcalde deje el puesto a los pocos meses de las elecciones, pero con buena voluntad se puede aceptar por el interés del PSOE de reforzar su candidatura. A partir de aquí todo es un completo disparate. Su sucesor también deja, repentinamente, el bastón de mando al poco de acceder al cargo. Y ahora viene lo más gordo: todos los concejales socialistas renuncian a reemplazarlo para que un empleado municipal, Ignacio Fernández, que nunca había ido en ninguna lista entre en la corporación como alcalde. Esta oscura maniobra la aceptó la dirección de la FSA, como si fuera algo normal. Sin embargo, el TC la echó a bajo. La FSA y la agrupación socialista de Cudillero negociaron una salida al problema, convirtiendo en alcalde al concejal, Luis Fernández Garay, que en su día había renunciado para dejar el camino expedito a Ignacio Fernández. El TC también anula su investidura.

En dos años, hubo cuatro alcaldes socialistas en Cudillero, siendo dos de ellos tumbados por los tribunales. La FSA debe una explicación a los asturianos, porque un asunto tan turbio nunca se había visto en torno a una alcaldía. No creo que encaje dentro la normalidad institucional que el otro día predicaba Javier Fernández en la Feria de Muestras.