La única cuestión relativa al Título Preliminar del Estatuto de Autonomía que se ha abordado hasta el momento es la capitalidad, introducida en el debate por Gabino de Lorenzo, antes de que la discutieran los miembros de la ponencia encargada de la reforma. El órdago del alcalde de Oviedo (reconocimiento explícito de la capitalidad o no hay reforma) fue asumido por el PSOE y por el PP. Ovidio Sánchez está ocupado en preparar el congreso regional de su partido, así que no está en condiciones de discrepar con Gabino de Lorenzo, su principal aliado para mantenerse al frente del PP asturiano. Los socialistas están muy interesados en reformar el Estatuto, lo que obliga a asumir planteamientos del resto de partidos. Poner en el Estatuto de Autonomía que Oviedo es la capital de Asturias no es ninguna novedad, ya que esa condición la tiene desde hace doce siglos. Hasta el momento no constaba en el Estatuto pero formaba parte de la historia, la realidad y la conciencia de los asturianos, así que no hay que vencer ninguna resistencia para introducirla en el texto.

Cosa distinta es la pretensión de Gabino de Lorenzo de explicitar la capitalidad para dotarla de una renta económica que compense las supuestas cargas ligadas al ejercicio de la capitalidad. Ovidio Sánchez quiere tratar esta demanda en una ley ordinaria que desarrolle el concepto de capitalidad. En el Estatuto se recoge el título y en la ley se reconocería el derecho a renta. Ni el PSOE ni IU están por la labor, pero ahora Jesús Gutiérrez, número dos del PSOE, da un paso más y acusa a Gabino de Lorenzo de querer usar la capitalidad para aliviar el endeudamiento del Ayuntamiento de Oviedo.

La propuesta de Gabino de Lorenzo es inviable porque choca con la inmensa mayoría de los asturianos que no quieren pagar diezmos a la capital por desempeñar un papel que lleva doce siglos llevando a cabo sin ayudas oficiales. El PP, como partido, jamás se meterá en un lío semejante porque perdería apoyos por todos los concejos. Ahora bien, sería muy interesante que la Sindicatura de Cuentas cumpliera con su labor y chequeara el estado financiero del Ayuntamiento de Oviedo, para esclarecimiento de contribuyentes y evitación de absurdas demandas al resto de la región.