Él ancestral problema de Cataluña, que no se pudo resolver en 1714, ni a lo largo de estos siglos, y que fue tratado siempre por la fuerza, ha ido mostrando su fracaso,con consecuencias que, hoy sábado, no podemos predecir.

Un problema que si se hubiera tratado políticamente hace mucho tiempo, posiblemente no nos tendría a todos los españoles ante una semana, varias semanas ,tan inciertas.Más vale un mal arreglo que un buen pleito, dice el dicho, pero mantengo que desde aquel 1714, hasta hoy la derecha española ha utilizado el garrote, la fuerza en vez del diálogo.Menos, pero en estos últimos 35 años se tiene que reconocer que los socialistas han tenido parte de culpa.

Los soberanistas, utilizaron inteligentemente el sistema bipartidista surgido de la Transición.Así ante dos partidos que siempre necesitaban los votos de los nacionalistas, desde Felipe González, José María Aznar, José luis Rodríguez Zapatero y, por supuesto Mariano Rajoy, les fueron sacando a cambio de sus escaños, recursos, infraestructuras, dinero, hasta que sintieron que el momento era el adecuado para dar el zarpazo.

Por supuesto se prendieron todas las alarmas, pero los catalanes soberanistas dieron pasos y pasos, siempre adelante del Gobierno y de los partido políticos, hasta llevarnos a la llamada “dexconexión” del lunes.

“Chula ella, chulos nosotros” decía el presidente del PP en Cataluña, tristemente celebre por su política xenófoba en su pueblo.

” Si se desconectan, al siguiente minuto les caerá todo el peso del Gobierno”, decía Soraya, ubicando todos los focos en la señora Forcadell.. Es lo que estaban deseando los soberanistas.Cualquier represión contra la Presidenta del Parlamento, va a ser tomado como un ataque a Cataluña, y ello va a crear, de nuevo, más soberanistas.

Por supuesto estoy en contra del Independentismo, pero procuro ponerme en la piel de esos tres y pico millones.Como los judíos en la diáspora, tan profundamente guardado en su corazón durante casi 2,000 años, los actuales catalanes soberanistas llevan en lo profundo de su ser las luchas de todos sus antepasados y la respuesta que han recibido de Madrid, y por ello hay consolidado más de tres millones de catalanes soberanistas.

José Luis Rodríguez, expulsado del ejercito en el último Consejo de Ministros,” por no haberse dado de baja en la Orden de San Hermenengildo”, era muy claro: el problema catalán sólo se resuelve con la política.

Toda España, bueno menos los que están clavados en Salvame, Hombres y Mujeres, Gran Hermano y toda la bazofia que hay en la televisión, bien manejada por el hombre de Berlusconi en la 5, para distraer la atención y cloroformizar a la población española, estaremos atentos a las 10 de la mañana del lunes;más tarde a eso de las 12.30 y la tarde de lo que pase en Cataluña y por supuesto de lo que pase en La Moncloa.

En Cataluña, los soberanistas, están esperando la represión contra Fortadell, para seguir yendo adelante en el proceso.