Hoy es un día decisivo para el futuro de los Estados Unidos y de parte del mundo.Hoy se decide quien será candidata o candidato del Partido Demócrata.El socialista, radical,(sic) Bernie Sanders(74 años) y la juventud norteamericana han dado una batalla ejemplar
Ante la feroz campaña de ellos han llevado al límite , casi sin recursos, a la representante del Establisment Hillary Clinton.A pesar de ir adelante en el número de delegados y haber ganado la semana pasada Hawai, Hillary Clinton, se apresuró ayer a declararse triunfadora y de tener ya todos los delegados para la Convención Demócrata, sin esperar a los resultados de los 5 estados claves del día de hoy entre ellos California, donde hay un empate técnico con Bernie Sanders.
Muy posiblemente la candidata que salga de la Convención del 18 de julio, se la señora Clinton .Sin embargo quiero destacar el valor y coraje que ha mostrado Bernie Sanders a sus 74 años de edad y la juventud republicana en esta desigual batalla, entre los poderes fácticos y la sociedad que ha tenido que movilizarse para intentar un cambio.Como en otros países ha surgido desde abajo la lucha de una parte de la sociedad.
El programa Demócrata llevará recogida varias demandas, por su fuerza, de este hombre y de los jóvenes norteamericanos.
Posiblemente hoy confirmará después de California, el mayor estado del país, con un empate técnico entre ambos, su triunfo y su candidatura a la Convención del 18 de julio. Y entonces empezará la verdadera batalla con el ” Hitler norteamericano con armas nucleares “Donald Trump.
Es pues un día importante el 8 de noviembre para norteamericanos y el mundo.
Bernie Sanders podría ser un magnífico candidato a la Vicepresidencia.
En esta modesta columna hemos advertido desde hace meses del ascenso imparable de Donald Trump. Muchos, en el mundo, como en el caso de Hitler, no han entendido la gravedad de que este hombre sea electo.Si gravívisimo fué lo de Hitler, reitero, era un líder de quinta categoría , en relación a Trump, tan sólo por que este dispone de 1,250 armas nucleares, todas ellas 100 veces más grande que las que los Estados Unidos tiraron sobre Hiroshima y Nagasaki, aquel triste agosto de 1945,que ahora recuerda Obama en Tokio, pero que de repetirse algo como aquello con Trump., posiblemente no habría nadie que celebrase años más tarde.
No es pesimismo, pero…….
Por supuesto el más contento en el mundo lo será su gran amigo Vladimir Putin.