No lo podía creer.Aquella bocanada de aire al abrir la ventana a las 6 de la mañana en La Calzada era igual que aquella otra que me había expulsado de aquella gran ciudad hace 35 años.El olor a podrido era inconfundible. La diferencia es que aquella ciudad tenía 2o millones de habitantes, estacaba colocada por hechos históricos a 2,200 metros de altura, […]