Estamos en un proceso dificil. Hay un ascenso imparable de la extrema derecha en Europa, mientras que en España, luchan abiertamente por ese voto tanto el Partido Popular como Ciudadanos.Parece que no nos percatamos y esa es la alerta.

Con el proceso catalán abierto; con la exhumación de los restos de Franco, empieza a aglutinarse la extrema derecha española,que trás el fracaso de Rajoy ha irrumpido en la escena. Sabedores de ello, en su afán por tratar de quedarse con esos votos, miles, decenas de miles o más, tanto Rivera como Casado escenifican ante la nación un enfrentamiento en el más bajo nivel.

Hoy la sesión de la Cámara donde el traslado del último de los tres dictadores fascistas intocable, sería en cualququier país, no de regocijo, pero por lo menos de avance en ele proceso democrático, se convirtió gracia a Rivera, en una sesión sobre validez o no de titulos.

Mientras  el Supremo espera la decisión del fiscal para saber si acepta a trámite el supuesto master de Pablo Casado, Rivera se le lanzó a la yugular al propio Presidente del Gobierno, acusándolo de plagio e irregularidades su doctorado,con la ayuda de un diario  monárquico. Durante el proceso de votación de la exhumación de Franco, sobrevoló en el ambiente una grave acusación: El Presidente miente.Acusación grave y además hacia la figura del presidente del Gobierno.

Pero el globo, lo hizo estallar el propio Pedro Sanchez. Llamó a la Universidad donde se puede consultar su tesis y decidió ,para que no hubiera asomo de duda ,que DESDE MAÑANA EN INTERNET CUALQUIERA PUEDE REVISAR SU TRABAJO.

Y de nuevo Pedro Sánchez, aquel desconocido que enfrentó a Felipe González, a Alfonso Guerra a Susana Díaz a su peón el asturiano Fernández y, que mas adelante de ser elegido democraticamente, se dió el lujo de tirar a Mariano Rajoy y hoy sacar el acuerdo parlamentario para exhumar los restos del Dictador, enfrentó el reto, con muestras de seguridad tal, que ha dejado la pelota en la cancha de Casado, que le puede costar la carrera política incipiente.

Pero el problema de fondo, es que España puede entrar, si la izquierda no lo impide, entrar en el selecto grupo de fascismos que recorre a Europa.

Les dijo muy bien la asturiana Adriana Lastra, al percatarse de la maniobra: ” Que no son tantos como creen…..”.

Sabremos, gracias al segundo entierro del ” Caudillo”, cuantos forman esa extrema derecha.

Por fortuna, con sus sólo 84 vovtos y sabiendo negociar con sus socios de gobierno, empezando por Unidos Podemos y nacionalistass canarios, vascos y catalanes, sigue sumando sus 177 escaños y avanzando en el programa que se fijó.

Por fortuna el año próximo en las municipales, autonómicas y europeas y en el 2020 con las generales, el pueblo español tendrá la posibilidad