Mantenemos lo dicho. En Afganistán el problema no son los Talibanes y su atrasadísima(para occidente) cultura, sino el Estado Islámico,
Recordemos el Daesh o ISIS, el Estado Islámico debe su origen a la acción de Bush, Blair y Aznar. Al atacar, con aquello de las armas de destrucción masiva, hizo que convergiesen lideres yihadistas que no se conocían. Allí en la cárcel de Bagdad, con techo y comida garantizados y todo el día para discutir, surgió la idea de la creación de un Estado Islámico, más allá de lo hecho por Bin Laden, para declarar la guerra al Occidente Cristiano.
Se creó entre Irak y Siria y sabemos los resultados.
Pero todos los miembros en África, Asia y en Europa, quedaron como “durmientes”, en espera de mejores momentos.
Y estos llegaron con la retirada, a ala desesperada de los EE:UU de Afganistán, que en 20 años y 5 de los soviéticos, sólo sirvió para estimular a los yihadistas.
El principal enemigo de los Talibanes es el ISIS. Ya había perpetrado en Kabul dos atentados contra ellos. La semana pasada murió misteriosamente aquel europeo que hizo las caricaturas de Mahoma, al ser embestido el auto donde iba con sus dos guardaespaldas.
Ayer en Marruecos capturaron a un comando del ISIS que iba a actuar, posiblemente en algún lugar de Europa.
Hoy en Afganistán, el ISIS, irrumpió con una bomba en los oficios religiosos que, como saben, en el Islam son los viernes, y mató, hasta ahora a más de 50 musulmanes chiitas.