En el siglo XIX, se logró establecer el cable submarino donde van todas las comunicaciones entre Europa y Estados Unidos. El primer hombre que lo logró, norteamericano, fué uniendo los 3,200 kms. entre Groenlandia a Irlanda.
Ahora, la gente se sorprende que viajando en la Ruta del Atlántico Norte, los pilotos vayan tranquilamente leyendo los diarios, como me ocurrió un día.
La razón es que los 2,200 vuelos que transitan entre EE:UU y Europa, lo hacen a través de dicha ruta. Para moverse por esa ruta, hay que tener la autorización desde un día antes.
Los aviones vuelan en varias capas con una distancia determinada entre ellas, y a determinada distancia entre uno y otro.
Así que cuando usted vuela por esa ruta, hay cientos de vuelos al mismo tiempo que lo hacen, perfectamente diferenciados sus espacios verticales y horizontales.
Cuando los aviones de Iberia viajaban por esa ruta, o viajan, suben hasta llegar a Terranova, y ahí entran en la Ruta del Atlántico Norte, que los que cruzan en 6 horas, y al llegar a España lo hacen por Santiago de Compostela, y ahí dan un giro a la derecha hasta Madrid.
Por ello, llamaba la atención la tranquilidad de los pilotos,con el automático puesto, leyendo los diarios, dado que van en su cómoda autopista.
Los pasajeros no sabemos que al mismo tiempo vuelan en esa zona centenares de aviones, hacia abajo, adelante y atrás, perfectamente calculado, y permanentemente controlados.
En la parte superior , donde se gasta menos combustible, viajan las principales líneas y van bajando según el nivel en que se ubique en el marco mundial a esa aerolínea.
Para tantos europeos y americanos que temen cruzar ” el charco” por que no hay tierra debajo, sepan que cada avión va perfectamente controlado por los diferentes controladores en ruta.