Difícilmente se percibe algo más que lo normal, que la vida diaria a que estamos acostumbrados en España y en el mundo.Aquí ni siquiera entendemos que SOMOS LA PRIMERA GENERACIÓN QUE VIVE 75 AÑOS EN PAZ, EN 1,000 AÑOS EN EUROPA.

Pandemia, recuperación económica, pero sobre todo el CAMBIO CLIMÁTICO  no los hemos solucionado. La tierra manda mensajes a diario que, mientras no nos llegue a nosotros no valoramos. Inundaciones, tormentas, sismos, avalanchas de lodo, a diario la tierra nos manda información.

Teníamos hasta 2030 para que la temperatura de la tierra no llegue a 2 grados, y estamos disputando y deseando que se deshielo el Ártico”porque allí hay petróleo, tierras, raras, y además es estratégico y se busca que pase la Ruta de la Seda”

Y ahora, en un punto de conflicto histórico como es Ucrania y su frontera con Rusia, como en  Belfast, Jerusalén Este y tantos y tantos más, donde he visto imagenes de las escuelas de Ucrania, en donde a los alumnos de secundaria tiene una materia que son prácticas de tiro” para salvar a la patria”.

Tras la Guerra Fría, todos se fueron por los despojos y riquezas de la Antigua URSS.La OTAN le quitó a Rusia Crimea y su única salida al Mar Mediterráneo.Estos en 2007 se opusieron, surgieron los Acuerdos de Minsk,que al no respetarlos, por la fuerza tomaron los rusos Crimea y Donbass.

Y estamos en un momento tan delicado de la historia que el común de las personas no comprenden: Una Guerra, que nadie desea, que no tendrá triunfadores, no es sólo la primera en Europa desde 1945, SINO QUE SERÁ LA PRIMERA EN 12,000 AÑOS EN UN ENFRENTAMIENTO MÁS ENTRE LOS HUMANOS, pero…..CON ARMAS NUCLEARES.

EE.UU, Rusia, Reino Unido y Francia, las tienen a niveles que es mejor ni pensar.

Ahora no es necesario esperar a 2030 para ver si cumplimos en la lucha contra el Cambio Climático, es que en 2022, empezando, puede darse un conflicto de consecuencias impredecibles.

Siempre he escuchado en mi vida: ” Es fácil sacar a los tanques, lo difícil es volver a meterlos”.

No hay que esperar a 2030 para saber el futuro de nuestra especie. Antes tenemos otros retos. El primero lo conoceremos esta semana en Ucrania.