No era cualquiera. Era el hijo de Adolfo Suárez, clave en la transición, que tuvo que soportar el golpe de Juan Carlos I, luego la actitud de Emilio Botín de quitarle la casa de toda su vida al no poder cumplir con el dinero que les dan los bancos con el fracaso de CDS, hecho que terminó con la vida de su madre, su hermana mayor y el alzheimer del padre, y se comió todo cuando el gran Pablo Casado lo invitó a salvar a España.
Secretario de la Mesa, fue un factor de tensión con los constantes e infantiles reacciones ante los miembros de Bildu. Cada que que pasaba después de hablar un representante de los vascos, el le daba la espalda, o se ponía a leer. El,SUÁREZ ILLANA ,era el auténtico defensor de la unidad en España y lo manifestaba un día sí, y otro también.
Hoy, le deben de haber llamado la atención en el PP, de sus infantilismo, y renunció como diputado y presidente de un organismo que le puso Casado.