Enfrascados los medios de comunicación de Occidente, tan manipulados como los rusos, en su deseo que haya cada vez más sanciones a Rusia y que aquel país colapse económicamente, pierden la perspectiva.

La guerra la pagamos los europeos. 8 paises entre ellos Alemania y Austria dependen en un 80 % del gas ruso y tardarán meses o años en encontrar substitutos.

Los armamentos para Ucrania lo mandamos los europeos, tras de que años de presión de los Estados Unidos, la Unión Europea, vivía tras el paraguas de la OTAN y no cumplía, hasta hoy con el 2 % de su PIB que exigía Estados Unidos.

Se olvidan de que además de este oxigeno que les da la propia Europa, embarcada en un conflicto por los Estados Unidos, y lo que solapó Zelenski de la vida corrupta y de drogadición de Hunter Biden, el hijo mayor de Joe Biden, del que ningún noticiero o diario español habla, Rusia tiene el apoyo total de China la India, que pagan muy bien el gas que este les envía desde Siberia.

Mientras en Washington siguen con sus perritos calientes, y sus palomitas viendo como los Yankees de Nueva York, ganaban a los Orioles de Baltimore, los muertos, los heridos, y los exiliados una vez más no son ellos. Ahora son los ucranianos, antes lo fueron los sirios, antes los vietnamitas.

Pero claro nunca nosotros en Europa nos preocupamos, hasta hoy que nos tocó a nosotros y que observamos en vivo y a todo color en el salón de nuestras casas, lo que ha sido una constancia del Homo Sapìens durante 12,000 años.