Hoy es un día clave en la relación entre el Gobierno de España y la Iglesia Catolica. En medio de ello la exhumación de los restos de Franco y el sacar a la luz todas las propiedades de la Iglesia en el país, decenas de miles, para analizar si son los propietarios y cual es su asituación fiscal.No es un asuntio menor.
La decisión de exhumar los restos de Franco “donde quiera la familia”, ha entrampado al Gobierno ante la jugada de lo extrema derecha trás la familia de Franco.El plantear que se traigan a la Almudena, gran objetivo de Vox, es situar en el corazón de Madrid los restos trasladando el lugar de peregrinación y de homenajes del Valle de los Caidos a 40 kilómetros al corzón de la capital.
Tan delicado es este asunto que la mismísima Vicepresidenta Carmen Calvo se encuentra en estos momento en El Vaticano, preparando su entrevista con el numero 2 del Papa y el hombre de su máxima confianza, toda vez que la Iglesia católica dice ” que no puede hacer nada contra la voluntad de a familia”.
Por ello se ha trasladado la petición al mismísimo Francisco I.
Dos elementos tiene en las manos el Gobierno: Ningun dictador fascista, ni Hitler está enterrado en la Puerta de Branderburgo, ni Mussolini en el Coliseo, que seria algo parecido a traer los restos del dictador al corazón de Madrid, a la Almudena.
El otro no hacer la exhumación y sacar a la luz pública los propiedades de la Iglesia, su inmensa fortuna al conocimiento público y regularizarlas.
La propuesta del Gobierno es que se trasladen los restos al El Pardo junto con su esposa y no tocar lo de las propiedades.
Mientras hoy Trump, Bannon, no han dormido al cerrar la pinza del ultraderechismo desde los Estados Unidos a Brasil, su gran triunfo, y el pueblo mexicano votó favor de Santa Lucia, que era la peor de las opciones de Villar Mir.