¿Hubiera nombrado Cristobal Montoro a Asturias como posible comunidad a intervenir en el caso de estar gobernada por el Partido Popular? ¿Por qué no citó a Valencia quien, de facto, ya ha sido rescatada de varios impagos en sus créditos? ¿Por qué no habla de Cataluña y su agujero económico de proporciones bíblicas? Además, ¿no dicen por allí que van a ser insumisos ante la Ley de Estabilidad Presupuestaria? Si la cuestión estaba en la falta de gobierno en nuestro paraíso natural, ¿por qué no señaló también al bipartito de Andalucía que se acaba de constituir hace unos días? ¿Por qué lo dice el sábado, justo antes de la reunión del jueves en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, cuando tendremos nuevo presidente el día 22? Volviendo al caso andaluz, ¿por qué no señala a esa comunidad cuanto su déficit -el día que se pueda saber- es infinitamente mayor que el asturiano? ¿Por qué no apunta con el dedo también a Castilla-La Mancha, donde, a pesar de los recortes, están por encima del 7%, es decir, el doble de Asturias? ¿No será porque allí gobierna María Dolores de Cospedal? ¿Por qué no señala a varias comunidades –sí, la Generalitat catalana o Valencia- que tienen rating de bonos basura? ¿Por qué no se lo comunicó directamente al Gobierno asturiano en vez de proclamarlo a los cuatro vientos? ¿Por qué no esperó al día 22, cuando se produce la elección del Presidente, a ver qué pasaba? ¿Por qué se saltaron a la torera todos los límites de la prudencia con Asturias dejándola a los pies de los caballos? ¿Lo hubiera hecho en el caso de que Mercedes Fernández fuese la próxima presidenta? ¿Por qué ese escarnio hacia esta comunidad?
Nota: véase la foto y sus caras para entenderlo.