Pasó el Debate de Orientación Política –también conocido como de Estado de la Región- sin pena ni gloria. Poco tenía que decir el gobierno de Javier Fernández apenas a los cuatro meses de llegar y, encima, pendiente de apoyos parlamentarios. Todo lo más, como así fue, esbozar un proyecto de presupuesto que se vislumbra complicado. La situación asturiana es, digámoslo así, como la de un coche parado. Tiene que comprar la gasolina (me refiero al crédito de 426 millones pendiente) y saber qué dirección va a tomar. En esto, sin duda, llevamos retraso respecto a otros. Mientras muchas comunidades han ido implantando políticas y medidas, nosotros hemos estado enzarzados en dos procesos electorales y con unas cuentas prorrogadas. Digamos que la llegada de Javier Fernández ha traído cierta normalidad –no tiene a todo el mundo en contra, como le pasó a Álvarez Cascos- pero debe superar todavía muchas pruebas de fuego. Una de ellas, sin ir más lejos, ver cómo sitúa el gasto en 3.500 millones de euros (estaba en 4.100) sin tocar Sanidad ni Educación y, encima, con el apoyo de IU. Grupo, como es sabido, completamente refractario a los recortes en lo público.
Respecto al último debate, el de pasar de 45 diputados a 35 en el Parlamento, se hace necesario matizar ciertas cosas. En principio, puede ser una buena medida de cara abaratar costes. Ahora bien, que se olvide cualquier grupo político más o menos pequeño de entrar en el Parlamento. Quiero decir con esto que, más que posiblemente, la futura cámara con 35 diputados sería sota, caballo y rey: PSOE, PP-Foro e IU disminuida a la mitad. Además, sean diez más o menos lo importante es su productividad. Es decir, el ciudadano no está pidiendo sólo que haya menos políticos, sino que trabajen más y sean mejores. Me refiero, claro está, a que busquen soluciones a sus problemas. Si van a ser diputados «aprieta botones» que sirven para seguir el dictado del partido de turno y poco más, que lo dejen incluso por debajo de 35. Si estamos hablando de políticos que legislan y tienen talento, está muy bien en los 45 diputados.
Nota: ni en esto se pusieron de acuerdo PP y Foro. Aunque llevaron la misma propuesta, la forma de llevarla a cabo, les hizo votar de forma diferente. Es una tragedia que, aún pensando lo mismo, siempre salen a relucir las discrepancias.