En nuestro Gijón del alma todo es política. Los nuevos tiempos –con un Consistorio tan fragmentado- es lo que tienen. Nada se escapa a su enrevesado y retorcido influjo. Ya sea para llegar a un acuerdo cualquiera, en la concesión de las medallas de la ciudad o en asuntos que no deberían tener mayor discusión. […]