Hace cuatro años, tal sábado como hoy estaba cayendo la tormenta de siglo en Gijón. Los contenedores flotaban como góndolas por las calles, las alcantarillas no paraban de escupir agua y el granizo se amontonaba en las aceras. Tal día como hoy, digo, la Corporación se constituía bajo esos malos augurios. Los dioses nos avisaban […]