Permítanme la ironía: en Madrid deben estar encantados con Gijón. Una ciudad que lleva esperando veinte años por una estación intermodal y no protesta. O lo hace, digámoslo así, de forma bastante limitada. Si quiera unas pocas manifestaciones -no muy concurridas, por cierto- y con nulo castigo en las urnas. Vamos, que pasar olímpicamente de […]