El plan de Movilidad que está pendiente de su aprobación no es más que un epílogo. Sí, el legado envenenado que deja esta Corporación para que lo cumpla la siguiente. En el mismo, podemos ver en forma de vademécum lo experimentado (sufrido) durante la presente legislatura en materia de movilidad. Es decir, prevé la construcción de tres «supermanzanas» a modo y manera de la que se está ejecutando en La Calzada. Una en La Arena, otra en El Muro y la tercera en la zona centro. Todo ello, sin saber muy bien qué efectos producirán en el tráfico y la vida de las personas la ecomanzana que se está llevando a cabo. Por cierto, con bastante polémica. Asimismo, dos vías circulatorias de gran capacidad (Pablo Iglesias y Manuel Llaneza) quedarán cercenadas de raíz. Pasarán a ser de doble sentido con lo que la circulación transversal tendrá que ser en la práctica a través de la ronda exterior. Es más, insiste en la idea de mantener un único carril en Rufo García Rendueles en sentido hacia el Piles, al considerar que el «cascayu» representó un éxito y su «afección sobre el tráfico fue mínima». Pregunto, ¿en qué planeta viven? ¿Es que no vieron lo que pasó en la avenida de la Costa cuando se cerró El Muro? Como digo, este plan no es más que la movilidad enloquecida de estos cuatro años con tapa dura. La misma que causa más problemas que beneficios y es impuesta a las bravas bajo el lema de «ya os acostumbraréis».

Sin duda, en el PSOE lo saben de sobra. No están conformes con este plan y están haciendo lo imposible para cambiarlo. Eso sí, tampoco se atreven a romper la baraja a pocas semanas de los comicios, aunque tengan miedo a sus consecuencias electorales. Por eso, el discurso ahora predominante consiste en restarle importancia. Dicen que el documento no es normativo y solo orientativo. Sin embargo, de repetirse la actual coalición del equipo de gobierno municipal, es de esperar que la parte de IU exija ejecutarlo ce por be. Y si no, ¿por qué se tiene que aprobar a última hora? ¿Por qué no se espera a lo que salga de las urnas? En definitiva, que a la dirección socialista local solo le queda hacer un papelón: tragar con un plan en el que no le gusta y que se puede convertir en arma arrojadiza durante la campaña por parte de la oposición. O dicho de otra forma: actuar como notarios del testamento que nos quiere dejar IU.

@balbuenajm