Dentro de poco se cumplirá un año de la estafa del vial de Jove. Ya saben, aquella infame reunión en Madrid (20 de marzo de 2024) con el secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano. A la misma, acudieron la alcaldesa, Carmen Moriyón, y el consejero de Fomento, Alejandro Calvo, para escuchar que habían sido víctimas de un «proyecto fake». Es decir, un bodrio que según el Ministerio de Transportes derribaba edificios. En resumen, adiós a casi 286 millones de euros de inversión. Pues bien, como digo, ha pasado casi un año y lo que tenemos es nada. No se ha avanzado ni un milímetro. El Principado -cuyo papel no sabemos si es el de tonto útil de Transportes- ha estado dando vueltas sin ningún resultado. Parece que se ha echado a la espalda el problema de los accesos a El Musel, pero de manera infructuosa. Entre otras cosas, porque la titularidad de las carreteras sobre las que se debe actuar es estatal. Esta misma semana en el Congreso, a preguntas de la diputada del PP, Mercedes Fernández, volvió a salir el vial. Es más, la secretaria general de Transporte terrestre (vamos bajando en el escalafón), Marta Serrano, reiteró que lo «más razonable» es la solución en superficie. Erre que erre. Por lo visto, no piensan mover un dedo y vamos a estar otros 20 años viendo pasar el tráfico pesado por La Calzada. Más si cabe, cuando la prioridad inversora pasará a ser Defensa y los recortes se los llevarán las infraestructuras. Insisto, 365 días después de que nos tomasen el pelo, no tenemos nada.
@balbuenajm