No cabe duda de que podría tener nombre de serie: perdidos. Y es que así, más o menos, es como se encuentran los dirigentes nacionales populares cuando pisan nuestro paraíso natural. No saben muy bien cómo actuar, ni a veces, visto lo de este fin de semana, qué decir. Fíjense si no lo que pasó con el vicesecretario general de Comunicación, Esteban González Pons. En un acto para arropar a la candidata, Pérez-Espinosa, soltó: «Sin un gobierno del PSOE o del PP, Asturias se quedará sin reformas». Agregando además: «Para que tú seas presidenta llamaremos a otras fuerzas políticas, empezando por el PSOE». Vamos, una visión estratégica apabullante. Pregunto, ¿es que prefieren pactar con el PSOE antes que con el partido de Cascos? ¿Es que prefieren que gobiernen los socialistas antes que Foro Asturias? Tal parece, la verdad, que venga a hacer campaña para mantener el statu quo actual, o sea, los socialistas gobernando y populares en la oposición. Eso a cualquier otra circunstancia que altere, como en la bella durmiente, el eterno sueño político que se repite cada cuatro años.Al final, lo que resquema en Madrid es la salida de Álvarez-Cascos del partido y no saben muy bien cómo afrontarlo. Si le critican, por supuesto, sienten que lo están haciendo con uno de los suyos metiendo el dedo en la llaga y, si no, creen que le están dando alas. Difícil tesitura, sin duda, a la que no están acostumbrados. Las campañas en Asturias hasta ahora eran bien fáciles: aparecían los dirigentes nacionales –como el primo de Zumosol- para apoyar al candidato y ya estaba. Sin embargo, esta vez las cosas son diferentes, porque, entre otras cosas, el de Zumosol ha creado otro partido.