El parque Científico Tecnológico fue promovido por el Ayuntamiento en 1999 y se encuentra ubicado en los terrenos de un antiguo campo de rugby. Hoy en día nadie duda de su rotundo éxito y que ha creado todo un ecosistema empresarial a su alrededor. Es más, en la actualidad estamos hablando de una ampliación por la demanda existente de parcelas. El proyecto que ayer se presentó, llamado Naval azul, intentará emular estos mismos pasos de cara a lograr idénticos objetivos. Recuperar una zona muy degradada de la ciudad, para convertirla en un polo empresarial y de ocio urbano. En principio, comprando los 37.900 metros cuadrados propiedad de la Autoridad Portuaria, que se empezarán a urbanizar hacia el 2026. Eso sí, faltaría el 40% restante en manos de Pequeños y Medianos Astilleros en Reconversión (PYMAR) de cara a completar la actuación. Hecho también relevante puesto que El Natahoyo debe quedar libre de cicatrices. Desde esta columna no podemos más que desear que esta historia que ahora comienza sea también un éxito. O sea, que no pase a engrosar la lista de proyectos zombi -muertos y que reviven solo en las infografías- que todavía tenemos en Gijón. Piensen si no en lo que sucedió con la Zona de Actividades Logísticas e Industriales de Asturias (ZALIA) y que no puede repetirse jamás. Estaremos vigilantes de los plazos y cumplimiento de los compromisos, así como de la promoción correspondiente para atraer a la iniciativa privada. Nuestra alcaldesa, Carmen Moriyón, dijo que Naval azul ya no tiene marcha atrás. Repito: que así sea.

@balbuenajm